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COLUMNA

Columna invitada

3 lecciones de San Pablo para superar el sufrimiento

Quiero iniciar esta reflexión a partir de tres citas de San Pablo que nos muestran un camino esperanzador ante los sufrimientos y embates de la vida.

25 enero, 2022
3 lecciones de San Pablo para superar el sufrimiento
Marcela Hernández
POR:
Autor

Licenciada en Ciencias de la Comunicación por la Universidad del Valle de México y está certificada como Coach Ontológico por parte del Tecnológico de Monterrey CEM. También tiene una especialidad en Logoterapia por parte del Instituto Mexicano de Tanatología. Instructor y facilitador en temas de desarrollo humano y empresarial, tales como: Sentido de Vida y Trabajo, Inteligencia emocional, Liderazgo, Coaching, Comunicación Asertiva, entre otros. Actualmente es Socia Fundadora de Sensum, empresa especializada en estrategias de sentido para empresas y personas. 

Este 25 de enero recordamos la conversión de San Pablo, Saulo de Tarso, quien siendo uno de los principales perseguidores de los cristianos, fue después uno de los apóstoles más apasionados para llevar el mensaje de Jesús a todo el mundo.

Esta conversión le significó un camino lleno de sufrimientos y tribulaciones; sin embargo, las abrazo y recibió desde la alegría que le daba “vivir en Cristo”; así definía él la vida, y nos enseña un camino de fe en el que incluso la muerte, la cual supone para la mayoría un gran sufrimiento, era para él una ganancia.

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Aquí algunas citas de San Pablo que nos muestran un camino esperanzador ante los sufrimientos y embates de la vida:

1.     “Dios dispone todas las cosas para el bien de quienes lo aman”.

¿Por qué a la “gente buena” le pasan “cosas malas”? Es un cuestionamiento muy común ante las penas propias y ajenas. Nos cuesta entender algunos de los caminos que Dios traza en nuestra vida para que lleguemos hacia Él.

Tanto es el dolor que en ocasiones nos nubla la mirada y golpea nuestra fe, a tal grado que olvidamos que Dios siempre busca nuestro bien. Sin embargo, bien no es sinónimo de placer y mucho menos sufrimiento lo es de castigo.

El bien que Dios dispone para nosotros no nos exenta de las tribulaciones y el dolor, pero nos dota de paz en medio de éstas, siempre y cuando las vivamos con la mirada puesta en Cristo, quien resignificó el sufrimiento mostrándonos el camino del perdón, la humildad y el amor como la única forma de vivir con sentido, incluso en medio de nuestras tormentas personales.

2.     “Si Dios está con nosotros, ¿quién estará contra nosotros?”.

Qué tranquilidad y consuelo nos transmite San Pablo con esta cita. El verdadero reto aquí será esforzarnos para permitir que Dios esté con nosotros. Abrirle la puerta, dejarlo entrar y, sobre todo, permitir que se quede a nuestro lado.

El miedo surge cuando se desvanece nuestra fe, cuando lo alejamos de forma consciente porque muchas veces es más cómodo vivir sin Él, ya que podemos hacer lo que nos plazca sin remordimientos de consciencia. En cambio, seguir a Dios es tener la certeza de que nos ama, pero también es adquirir el compromiso de vivir conforme a su palabra.

Son los momentos de sufrimiento una gran oportunidad para regresar a nuestro Padre. Desde este punto, el miedo que experimentemos ante cualquier riesgo que amenace nuestra integridad o la de los seres que amamos, no podrá ser más fuerte que la paz que nos da su presencia.

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3.     “Todo depende no del querer o del esfuerzo del hombre, sino de la misericordia de Dios”.

Ante el sufrimiento es común que neguemos nuestra realidad y que caigamos en la trampa de creer que somos autosuficientes para resolver la situación, si es que invertimos toda nuestra voluntad y determinación.

Cumplamos con nuestra parte, pero ponderemos nuestro esfuerzo por aceptar su voluntad antes que la nuestra. Practiquemos y fortalezcamos la humildad para abrazar lo que Dios espera de nosotros y para soltar nuestras propias expectativas ante lo que imaginamos que “debería” hacer o ser Dios si en verdad nos amara.

A Dios no se le cuestiona ni se le pone a prueba, a Dios se le confía y se le responde ante las pruebas que ÉL nos pone.

¿A ti qué te hace confiar en alguien? Es el conocimiento de una persona lo que nos lleva a creerle y a fiarnos de ella. Del mismo modo, debemos buscar a Dios, diariamente, en la oración, en su palabra, en sus sacramentos, de manera que lo conozcamos cada día más y así seamos capaces de abandonarnos a su voluntad y confiar en su infinita misericordia.

¿Quién es Marcela Hernández?

Licenciada en Ciencias de la Comunicación por la Universidad del Valle de México y está certificada como Coach Ontológico por parte del Tecnológico de Monterrey CEM. También tiene una especialidad en Logoterapia por parte del Instituto Mexicano de Tanatología. Instructor y facilitador en temas de desarrollo humano y empresarial, tales como: Sentido de Vida y Trabajo, Inteligencia emocional, Liderazgo, Coaching, Comunicación Asertiva, entre otros. Actualmente es Socia Fundadora de Sensum, empresa especializada en estrategias de sentido para empresas y personas.

Nota: Los artículos de la sección de opinión son responsabilidad única del autor y no representan necesariamente el punto de vista de Desde la fe.


Autor

Licenciada en Ciencias de la Comunicación por la Universidad del Valle de México y está certificada como Coach Ontológico por parte del Tecnológico de Monterrey CEM. También tiene una especialidad en Logoterapia por parte del Instituto Mexicano de Tanatología. Instructor y facilitador en temas de desarrollo humano y empresarial, tales como: Sentido de Vida y Trabajo, Inteligencia emocional, Liderazgo, Coaching, Comunicación Asertiva, entre otros. Actualmente es Socia Fundadora de Sensum, empresa especializada en estrategias de sentido para empresas y personas.