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7 de marzo: La Iglesia celebra a las santas Perpetua y Felícitas

6 marzo, 2021
7 de marzo: La Iglesia celebra a las santas Perpetua y Felícitas
Santas Perpetua y Felícitas.
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Las mujeres han enriquecido el martirologio cristiano y han dado muestras de valor y de fe, dando un ejemplo invaluable de su amor a Cristo.

Un ejemplo de ello es Santa Perpetua, una noble cartaginesa que pertenecía a una familia noble y que fue bautizada poco antes de su muerte iniciándose en el cristianismo a través de un diácono, quien también encaminó por el mismo camino a sus esclavas: Felícitas, Revocato, Saturnino y Segundo.

Hay confusión en las redes sociales acerca de sus biografías, por lo cual recurrimos a la fuente primaria: las Actas de los mártires que dan testimonio jurídico del proceso al que fueron sometidos aquellos santos de los primeros siglos; dice: “fueron detenidos los adolescentes catecúmenos Revocato y Felicidad, esta compañera suya de servidumbre; Saturnino y Secúndulo, y entre ellos también Vibia Perpetua, de noble nacimiento, instruida en las artes liberales, legítimamente casada, que tenía padre y madre y dos hermanos, uno de estos catecúmeno como ella, y un niño pequeñito que criaba a sus pechos. Ella contaba con unos 22 años.”

Santas Perpetua y Felícitas.

Santas Perpetua y Felícitas.

Bajo denuncia, ellos y otros fueros apresados y sometidos a juicio por Hilario quien procuró que apostataran y ante su fracaso, las condenó a las fieras y como por esas fechas se celebraba “el natalicio del César Geta” se decidió que para entonces fueran martirizados.

“Yo entendí que mi combate no había de ser tanto contra las fieras, sino contra el diablo”, decía la mártir. 

Añadió: “Brilló, por fin el día de su victoria y salieron de la cárcel al anfiteatro, como si fueran al cielo, radiantes de alegría y hermosos de rostro, si conmovidos, acaso, no por el temor, sino por el gozo. Seguía Perpetua con rostro iluminado y paso tranquilo, como una matrona de Cristo, como una regalada de Dios, obligando a todos, con la fuerza de su mirada, a bajar los ojos. Felicidad iba también gozosa de haber salido bien del alumbramiento para poder luchar con las fieras, pasando de la sangre a la sangre, de la partera al gladiador, para lavarse después del parto con el segundo bautismo”.



“Perpetua cantaba himnos… Rebocato, Saturnino y Saturo increpaban al pueblo que los miraba y cuando llegaron a la tribuna de Hilario, con gestos y señas empezaron a decirle: Tu nos juzgas a nosotros, a ti te juzgara Dios.” Fueron atacados por un leopardo, un oso, un jabalí, y una vaca bravísima para la cual las inmovilizaron con redes. La primera en ser lanzada de alto fue Perpetua y cayó de espaldas. Sobreviviendo a la embestida, dijo a su hermano: permaneced firmes en la fe.”

La historia de su martirio fue popular en los siglos IV y V. San Agustín decía que su pasión se leía con frecuencia en las iglesias y reuniones.

Tras su muerte. Fue sepultada en el cementerio de Máximo y desde fecha muy tempranas, su nombre aparece en el Canon de las misas.

Sus vidas inspiraron dos novelas históricas: Perpetua una novia, una mártir, una pasión que fue escrita por Amy Peterson y La escalera de bronce de Malcolm Lyon.





Autor

Periodista decano en la fuente religiosa. 

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