¿Cómo NO se debe vestir al Niño Dios? No cometas estos errores

Como sucede cada año, el próximo 2 de febrero, en que la Iglesia celebra el Día de la Candelaria, muchos fieles vestirán sus imágenes del Niño Dios para llevarlas a bendecir a su parroquia, como marca una antigua tradición fundamentada en sendos pasajes de la Biblia: la Purificación de la Virgen María y la Presentación del Niño Jesús en el templo de Jerusalén.

De manera que próximamente estaremos viendo otra vez en nuestras iglesias cantidad de Niños Dios engalanados con bellos trajecitos, ya sea comprados o confeccionados en casa.

Sin embargo, cuando se trata de vestir al Niño Dios, podemos cometer serios errores, pues no es una imagen a la que se le pueda tratar como un muñeco; sino que, por lo que representa, es necesario tratarla con decoro, y no restarle dignidad poniéndole un atuendo inadecuado.

¿Cómo no debo vestir al Niño Dios?

Entonces, ¿cómo no se debe vestir al Niño Dios en el Día de la Candelaria? Al tratarse de una tradición popular, no existen reglas como tal, pero la Iglesia Católica ofrece algunas orientaciones para vestir las imágenes de manera decorosa y con respeto.

¿Por qué vestimos al Niño Dios en el Día de la Candelaria?

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Si bien la tradición de vestir la imagen del Niño Dios y de llevarla a la iglesia para bendecirla no es parte de la liturgia, sino de la piedad popular, la Iglesia utiliza esta oportunidad para orientar a sus  fieles sobre la correcta devoción hacia las imágenes sagradas, en particular, la del Niño Dios.

Algunos hermanos separados critican a los católicos porque consideran que vestir al niño Dios es una superstición, pero no es así.

Los católicos no adoramos la imagen, sino a Jesús. Por eso la Iglesia insiste en que no se caiga en supersticiones pensando que la imagen tiene frío y que se le cambia el atuendo para que ‘no se enoje’. Vestimos nuestra imagen respetuosamente y la llevamos a bendecir a la parroquia para evocar el momento en que la Virgen María y san José fueron al templo de Jerusalén para cumplir con el rito de la purificación y para presentar al Niño Jesús, como marcaba la ley.

Así que, cuando participamos de esta bella tradición, es importante hacerlo debidamente, y no caer en el error de vestirlo de acuerdo con nuestras aficiones deportivas, ni conforme a nuestras inclinaciones políticas, celebridades históricas u otras filias, que responden más a lo terrenal que a la esencia divina de lo que representa: a Dios Niño.

Es importante tener claro que no necesitamos gastar mucho dinero en la ropa.

¿De qué no vestir al Niño Dios para el Día de la Candelaria?

Es un hecho que, en algunos casos, la práctica de vestir al Niño Dios se ha distorsionado. Y es que, por necesidad de venta o por mera diversión, se han creado distintas opciones de vestidos o trajes del Niño Dios que no van de acuerdo con esta tradición de la religiosidad popular.

7 cosas que NO debes hacer al vestir al Niño Dios:

1. Vestirlo a la manera de algún personaje público.
2. Colocarle trajes típicos o regionales.
3. Ponerle accesorios propios de culturas ajenas al cristianismo.
4. Vestirlo con uniformes de equipos de futbol o de algún otro deporte.
5. Disfrazarlo de algún super héroe.
6. Vestirlo de ángel o de arcángel, pues su imagen representa a Dios.
7. Vestirlo de santo. Esto es rebajar a Dios a nivel de criatura. Los santos quieren imitarlo.

¡Y mucho cuidado con los vestidos de ideas contrarias a la fe católica, como la mal llamada “Santa Muerte”. Tampoco le adornes su cabeza con moneditas ni le pongas un borrego dizque para tener “lana”, pues eso es pura superstición.

Entonces, ¿cómo se debe de vestir al Niño Dios?

Lo más recomendable es vestir al Niño Dios ropita para bebé: gorrito, chambrita y zapatitos tejidos.

Y si estamos interesados en buscar otras opciones procuremos que sea de alguna advocación de Cristo. En el siguiente link podrás encontrar algunos ejemplos de advocaciones de Jesús:

Artículo actualizado el 22 de enero de 2024.