Posadas navideñas 2025: ¿cuándo empiezan y por qué son nueve?

Como ocurre cada año, al iniciar el mes de diciembre los hogares se llenan de adornos, colores y luces para prepararnos a recibir al Niño Jesús y en este marco festivos, las posadas marcan el preámbulo para ese gran acontecimiento, por lo que estas celebraciones no son otra cosa que una novena de Navidad, por eso inician 9 días antes, ¿pero cuándo empiezan las posadas navideñas?

¿Cuándo empiezan las posadas en la Navidad 2025?

Las posadas para esta Navidad 2025 inician el martes 16 de diciembre y terminan el miércoles 24 de diciembre, en vísperas de la Navidad.

Las posadas navideñas son una tradición muy mexicana, cuyo origen se remonta a los primeros misioneros evangelizadores venidos de España a México-Tenochtitlán, principalmente los misioneros agustinos.

Estos religiosos se establecieron en el pueblo de San Agustín Acolman, en el Estado de México, muy cerca de Teotihuacán, y fue en ese lugar donde se originó la práctica de la celebración de las Posadas a finales del siglo XVI.

¿Qué son las posadas navideñas?

Las posadas navideñas son un período de 9 días que representa simbólicamente los nueve meses de embarazo de María, la madre de Jesús, y también refleja el peregrinar de la Virgen y de José en busca de un lugar para alojarse en Belén.

La procesión que se lleva cabo y las oraciones que se hacen reflejan los desafíos que enfrentaron María y José en la búsqueda de un lugar donde pudieran pernoctar, así como la eventual alegría de encontrar un lugar para el nacimiento del Hijo de Dios.

De esta manera, los nueve días de las posadas son un período de reflexión, preparación y celebración por la próxima llegada de nuestro Salvador.

Es importante señalar que las posadas navideñas se realizan durante nueve días, ya que cada día simboliza un mes de embarazo de la Virgen María y, por ende, un mes de la espera del nacimiento de Jesús.

Así, el último día de las posadas navideñas, que coincide con la víspera de la Navidad, es especial y conmemora el momento en que María y José finalmente encontraron un refugio en Belén, en donde nacería el Hijo de Dios.

¿Cómo se celebran las posadas navideñas en México?

Cada una de las nueves noches de las posadas navideñas los participantes se reúnen en un lugar específico para realizar una procesión con la que se recrea la búsqueda de posada que realizaron María y José previo al nacimiento del Niño Jesús.

Durante los nueve días los participantes visitan un conjunto predeterminado de casas y representan los obstáculos y rechazos que enfrentaron María y José antes de encontrar refugio. Así, al llegar al lugar designado para solicitar posada cada noche, se entona el tradicional canto para pedir alojamiento al dueño del lugar.

Al final de la procesión y de la petición de posada, los participantes celebran rezando el Santo Rosario, compartiendo alimentos y bebidas, además de romper la tradicional piñata.

¿Cuál es el origen de las posadas navideñas?

Para comprender cómo se establecieron las fechas de las posadas navideñas, es importante conocer primero su origen.

El padre José Luis Fernández Martín, sacerdote de la Arquidiócesis Primada de México, en su libro “La Navidad en México, orígenes y celebraciones“, explica que, antes de la llegada de los españoles, nuestros antepasados celebraban las fiestas en honor de Huitzilopochtli, prácticamente durante todo el mes de diciembre.

“Con la llegada del solsticio de invierno, el pueblo se congregaba en los patios de los templos iluminados por enormes fogatas, atizadas a veces con maderas perfumadas”.

La noche del 24 de diciembre, y al día siguiente, el 25 de diciembre, había fiestas en todas las casas, donde se obsequiaba comida a los invitados, así como pequeños ídolos elaborados con pasta comestible.

¿Cómo se estableció que fueran 9 posadas?

Fue a partir de estas celebraciones que realizaban los pueblos originarios que a los misioneros agustinos se les ocurrió aprovechar la coincidencia de las fechas para introducir la celebración del Nacimiento del Hijo de Dios entre los pobladores.

De esta manera, en lugar de celebrar los días de las fiestas prehispánicas, introdujeron el novenario de José y María. “Es decir, utilizaron para esto la representación del peregrinar de José y María, de Nazaret a Belén, para cumplir con el deber de empadronarse, ordenado por el emperador romano César Augusto”, explicó el padre Fernández Martín.

Y agregó: “Para celebrar las posadas se escogieron los últimos nueve días antes del nacimiento del niño Jesús. Por ello, esta representación o petición de posada, comienza el día 16 de diciembre y finaliza el 24 de diciembre, último día de la novena”.

La posada navideña, una perfecta inculturación

En 1587,  el superior del convento de San Agustín de Acolman, fray Diego de Soria, obtuvo del Santo Padre Sixto V la autorización para celebrar en la Nueva España las Misas llamadas de “aguinaldo”, del 16 al 24 de diciembre, y que se llevaban a cabo en los atrios de las iglesias.

Entre las Misas se intercalaban pasajes y escenas de la Navidad; asimismo, para hacer más atractivas estas celebraciones, se les agregaron luces de bengala, cohetes y villancicos. Con el paso del tiempo se fusionó el sistema catequístico franciscano de la piñata.

Posteriormente, de los atrios y patios de las iglesias y conventos, pasaron las posadas a los barrios y vecindades, en donde se añadió el famoso ponche, bebida típica navideña hecha de frutas.

** Esta nota se actualizó el 10 de diciembre de 2025.