Aunque las advocaciones marianas son muchas, hay cinco en particular que le gustan especialmente al Papa Francisco, al menos según sus bellísimas palabras para la Virgen María y las acciones que muestran su afecto. Esta es la selección elaborada por Desde la fe:
La pintura fue realizada por encargo y se le atribuye una milagrosa intercesión a favor del matrimonio.
Es una de las advocaciones favoritas del pontífice, quien tras quedar cautivado por ella la llevó en 1986 a su natal Argentina. El futuro papa había visitado el país porque tenía el proyecto de realizar una tesis sobre el académico y teólogo Romano Guardini.
Durante su estancia en una residencia jesuita descubrió el lienzo que mostraba a Nuestra Señora Desatanudos. Es obra de Johann Georg Melchior Schmidtner. Simboliza en los nudos las serias dificultades del hombre que la Virgen María desata.
Su base es que “la fe de María desata el nudo del pecado” (cf. Lumen gentium, 56). “Esos nudos nos quitan la paz y la serenidad”.
“Y María, que con su «sí» ha abierto la puerta a Dios para deshacer el nudo de la antigua desobediencia, es la madre que con paciencia y ternura nos lleva a Dios, para que él desate los nudos de nuestra alma con su misericordia de Padre”, dijo Papa Francisco el sábado 12 de octubre de 2013.
Es mestiza y nos une. Por eso el Papa la quiere tanto. En sus palabras: “Es una advocación milenaria que ya en su raíz etimológica nos habla de mestizaje, de encuentro con Dios y los hombres. Mestizaje porque los estudiosos no se logran poner de acuerdo si debemos leer el título ‘Guadalupe’ en árabe, latín o náhuatl. Pero es curioso que lo que podría plantearse como un conflicto pueda en realidad leerse como un guiño del Espíritu Santo que hace escuchar su mensaje de amor a cada uno en su lengua”.
Nuestra Señora de Guadalupe llegó presentándose como la “Madre del verdaderísimo Dios por quien se vive” (cf. Nican Mopohua); y vino para consolar, para atender las necesidades de los más pequeños, sin excluir a nadie, para arroparlos como madre solícita con su presencia, su amor y su consuelo. Es nuestra Madre mestiza”.
Hoy como ayer, quiere encontrarse con nosotros, como un día con Juan Diego en el cerrito del Tepeyac. Nos suplica que abramos nuestra vida a su Hijo Jesús y acojamos su mensaje para aprender a amar como Él.
Nuestra Señora de Bonaria es la patrona principal de la isla de Cerdeña y también de los marineros italianos. Su hermoso santuario recibió la visita de Pablo VI en 1970, Juan Pablo II en 1985, Benedicto XVI en 2008, y de Francisco el 22 de septiembre de 2013.
Esto dijo: “He venido en medio de vosotros para ponerme con vosotros a los pies de la Virgen que nos da a su Hijo. Sé bien que María, nuestra Madre, está en vuestro corazón, como testimonia este Santuario, al que han subido muchas generaciones de sardos —¡y seguirán subiendo! — para invocar la protección de la Virgen de Bonaria”.
“Vosotros traéis aquí las alegrías y los sufrimientos de esta tierra, de sus familias, y también de los hijos que viven lejos, que muchas veces partieron con gran dolor y nostalgia para buscar un trabajo y un futuro para sí y para sus seres queridos”.
“Hoy, todos nosotros aquí reunidos, queremos dar las gracias a María porque está siempre cerca de nosotros, queremos renovar a Ella nuestra confianza y nuestro amor”.
En un mundo cargado de “violencia, división, rivalidad y guerra”, el papa Francisco apela al amor maternal de la “Protectora del Pueblo Romano” (mejor conocida como Nuestra Señora de las Nieves) y su intercesión divina.
“¿Podemos salir de esta espiral de dolor y de muerte? ¿Podemos aprender de nuevo a caminar por las sendas de la paz? Invocando la ayuda de Dios, bajo la mirada materna de la Salus Populi Romani, Reina de la paz, quiero responder: Sí, es posible para todos”.
“Me gustaría que desde todas las partes de la tierra gritásemos: Sí, es posible para todos. Más aún, quisiera que cada uno de nosotros, desde el más pequeño hasta el más grande, incluidos aquellos que están llamados a gobernar las naciones, dijese: Sí, queremos”.
“Mi fe cristiana me lleva a mirar a la Cruz. ¡Cómo quisiera que por un momento todos los hombres y las mujeres de buena voluntad mirasen la Cruz!”
“En el silencio de la Cruz calla el fragor de las armas y habla el lenguaje de la reconciliación, del perdón, del diálogo, de la paz”.
En opinión del papa Francisco, esta advocación mariana es un hermoso Modelo de la Iglesia y ha bendecido al Carmelo con un carisma original para enriquecerla, al tiempo de comunicar al mundo la alegría del Evangelio… “con las palabras y ante todo con la vida”.
Destaca el pontífice tres líneas de acción de inspiración mariana:
En México, según datos del INEGI, más de 35 millones de personas han atravesado por…
Con un viaje de sólo un día a Córcega, el Papa culminará su agenda de…
El cristiano tiende a la alegría porque se sabe amado, escuchado y perdonado por Dios……
Ciudades como Los Ángeles o Nueva York han empleado hip hop y rap para reducir…
El feminismo, una corriente filosófica y social que busca la igualdad de derechos y oportunidades…
“Y recorrió toda la comarca del Jordán, predicando un bautismo de conversión para perdón de…
Esta web usa cookies.