Secretario de Benedicto XVI habla sobre mejora en la salud del Papa
Está de buen humor y sereno y ha reanudado sus paseos por los jardines, dijo su secretario.
¿Cómo es el día a día del Papa emérito Benedicto XVI? De acuerdo con su secretario particular, “Benedicto XVI es como un hombre de 93 años: Su cuerpo es frágil, su voz es muy débil, pero su mente está clara. Todos los días concelebra la misa, reza, recibe algunas visitas más, lee, estudia, escucha música, se ocupa de su correspondencia. Ciertamente con un ritmo tranquilo. Descansa más a menudo porque su fuerza ha disminuido, pero está de buen humor y sereno”.
Monseñor Georg Gänswein hizo estas declaraciones en entrevista con Maria Giuseppina Buonanno publicada en el semanario italiano Oggi, y citada por Zenit.
En dicha entrevista negó que la salud del Pontífice empeorara, “se han difundido noticias falsas”, dijo.
Luego de su visita a Alemania, previa a la muerte de su hermano mayor, el Papa sufrió un herpes en la cara que era doloroso, del cual se ha recuperado poco a poco.
“Después de una pausa de casi tres meses, ha vuelto a caminar con la ayuda del andador en los jardines del Vaticano, si el tiempo lo permite. Y se ha recuperado del cansancio del viaje a Alemania, donde estuvo el pasado mes de junio para visitar a su hermano Georg, que murió más tarde, y del herpes zoster, un virus que le causó fuertes dolores y le afectó al principio del viaje en Ratisbona”, dijo Mons. Ganswein de acuerdo con Zenit.
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La relación con Francisco
Mons Gänswein también habló en la entrevista de la relación más cercana que el Papa Benedicto XVI y el Papa Francisco han tenido.
El Papa Francisco lo visitó en junio, antes de que el Papa emérito partiera a Alemania a ver a su hermano.
“Benedicto XVI llamó al Papa Francisco y le dijo que quería ver a su hermano de nuevo porque estaba muy enfermo. El día de su partida, Francisco tocó el timbre del monasterio Mater Ecclesiae para saludarlo. Llegó sin avisar, solo. Habló con el Benedicto y le pidió que transmitiera su bendición apostólica a su hermano enfermo”.
Además, el Sumo Pontífice envió al Papa emérito una copia encuadernada en cuero blanco de su última encíclica, Fratelli Tutti, con una dedicatoria personal, mientras que Benedicto envió al Obispo de Roma una copia de su biografía publicada en italiano por Peter Seewald: Benedicto XVI – Una vida.
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