La Ofrenda de Muertos de la Catedral de México dedicada a la Virgen de Guadalupe
Carlos Villa Roiz El tradicional Altar de Muertos que cada año se monta de manera artística en la Catedral Metropolitana de México, fue instalado este año frente a la Capilla de los Ángeles y está dedicado a las apariciones de la Virgen de Guadalupe en el Tepeyac que tuvieron lugar en 1531. La ofrenda fue […]
Carlos Villa Roiz
El tradicional Altar de Muertos que cada año se monta de manera artística en la Catedral Metropolitana de México, fue instalado este año frente a la Capilla de los Ángeles y está dedicado a las apariciones de la Virgen de Guadalupe en el Tepeyac que tuvieron lugar en 1531.
La ofrenda fue preparada por la Lic. Isabel Aguilar Oros, especialista en decoración, y abarca una superficie aproximada de 5 metros cuadrados e incluye unas 10 figuras de unos 75 centímetros cada una; entre ellas, una está dedicada a San Juan Diego quien porta su tilma.
La ofrenda también cuenta con varios telones de fondo con paisajes que enriquecen visual y culturalmente el montaje, así como la representación de algunos frailes francisanos, los primeros evangelizadores de México, además de las tradicionales flores de Cempasúchil, velas y otros adornos y ambientaciones.
Vale la pena recordar que en la actual sacristía de la Catedral de México, estuvo el ayate original de San Juan Diego con la imagen de la Virgen y que fue traído en solemne procesión a causa de una inundación que duró más de cuatro años, a partir del 21 de septiembre de 1629 y que obligó a emigrar de la Ciudad de México a unas 30 mil personas, de las 70 mil que entonces había. La tilma regresó a su templo en el Tepeyac hasta 14 de mayo de 1634.
En los Días dedicados a los fieles difuntos y a todos los santos, el 1 y el 2 de Noviembre, también es una tradición la apertura de la Capilla de las Reliquias que contienen los restos de algunos de los principales santos y beatos de la Iglesia, y que fueron traídos a México desde Europa para consagrar desde el siglo XVI los altares de las primeras iglesias que los misioneros edificaban en el país.
En esta misma Capilla también hay varias figuras artísticas realizadas con cera y finas telas que tienen incrustados fragmentos óseos de algunos de los santos de la Iglesia Universal, además de bellos retablos, y una valiosa reliquia histórica que contiene una astilla de la cruz de Cristo.
Por lo general, esta Capilla permanece cerrada todo el año y solo es posible visitarla en estas fechas.