Lamenta el Papa el asesinato de Shinzo Abe, ex Primer Ministro japonés

Este 9 de julio, la Oficina de Prensa de la Santa Sede hizo público el telegrama enviado por el Papa Francisco al Nuncio Apostólico en Japón, Mons. Leo Boccardi, en el que se leen las condolencias del Santo Padre para al pueblo nipón por el asesinato del ex Primer Ministro Shinzo Abe.

Puedes leer: El Papa Francisco desmiente los rumores: “No voy a renunciar”

El Papa Francisco señaló que recibió con profunda tristeza la noticia de dicho homicidio, y en envió su más sentido pésame a los familiares de Shinzo Abe, a sus amigos y a todo el pueblo japonés, que hoy se encuentra de luto.

“Tras este acto sin sentido -escribió el Papa Francisco en dicho telegrama-, rezo para que la sociedad japonesa se fortalezca en su compromiso histórico con la paz y la no violencia”.

Sobre el homicidio

El ex Primer Ministro Japonés Shinzo Abe falleció este viernes 9 de julio a causa de dos disparos que recibió mientras llevaba a cabo un acto de proselitismo electoral en la región de Nara, de acuerdo con lo que informó la cadena NhK.

Al momento en que Shinzo Abe pronunciaba un discurso de apoyo al candidato del Partido Liberal Democrático, de cara a las próximas elecciones de la Cámara Alta, se escucharon las dos deflagraciones del arma que quitó la vida al político japonés de 67 años.

Aún con vida, Shinzo Abe fue trasladado de emergencia al hospital de la ciudad de Kashihara, en la región de Nara, donde los médicos ya no pudieron hacer nada para salvarle la vida.

El Papa y Shinzo Abe

El 25 de noviembre de 2019, el Papa Francisco se reunió con Shinzo Abe en el marco del Viaje Apostólico que realizó a Japón. El encuentro se llevó a cabo en Kantei, el complejo de edificios de Tokio que alberga las oficinas y la residencia del Primer Ministro.

Concluía la reunión, ambos se dirigieron a un encuentro con las autoridades y el cuerpo diplomático, donde el Papa Francisco pronunció un discurso sobre la importancia de dialogar. Tras señalar que el diálogo debe ser la única arma del ser humano, el Santo Padre habló de la necesidad de analizar la cuestión nuclear en el plano multilateral.