Escuchemos al Papa Francisco
Escuchemos al Papa Francisco y hagamos nuestras sus peticiones para reforzar los cimientos del futuro de nuestro mundo
El Papa Francisco cumple 10 años como líder de la Iglesia universal y en este tiempo nos ha dado la guía para enfrentar los problemas que hoy duelen al mundo.
A propósito de este aniversario, hacemos una invitación a ser parte de un proceso de cambio urgente y necesario para detener aquello que hoy nos lastima y reparar nuestras heridas como sociedad.
Por ello, escuchemos y atendamos el llamado que el Papa Francisco ha hecho a los políticos, cuando los ha exhortado a trabajar juntos y dejar el camino del privilegio a unos pocos, porque puede dar paso a la corrupción.
Escuchemos al Papa Francisco cuando nos dice que debemos trabajar cerca de los más pobres porque no se trata de tener un comportamiento asistencialista, sino hacer un esfuerzo para que a nadie le falte lo necesario.
Escuchemos al Papa Francisco cuando exige tolerancia cero contra los abusos a los menores en la Iglesia y en cualquier ámbito social.
Escuchemos al Papa Francisco cuando condena la violencia machista hacia las mujeres y levanta la voz para decir: “¡Basta!, herir a una mujer es ultrajar a Dios”.
Escuchemos al Papa Francisco cuando nos alerta sobre el cuidado que debemos de darle al medio ambiente y nos pide actuar con urgencia para “cuidar de la naturaleza, para que ella cuide de nosotros”.
Escuchemos al Papa Francisco cuando nos pide que abramos las puertas a los migrantes y refugiados, porque no son invasores, y su contribución enriquece a la humanidad, además de recordarnos que la inclusión de los más vulnerables es una condición necesaria para el Reino de Dios.
Escuchemos al Papa Francisco cuando pide que se universalice el acceso a la salud, porque no es un bien de consumo, sino un derecho universal: “toda persona debe tener acceso a la atención de la salud, quienquiera que sea, dondequiera que viva”.
Escuchemos al Papa Francisco cuando pide que se combatan los fake news, se eviten los discursos de odio y se “ayude a las personas a desarrollar un sano sentido crítico, a distinguir la verdad de la falsedad, lo correcto de lo errado, el bien del mal”.
Escuchemos al Papa Francisco cuando nos pide frenar la locura de la guerra y construir un horizonte de paz, a través del diálogo, el respeto y la confianza, porque está en juego la supervivencia de la humanidad.
Escuchemos al Papa Francisco cuando pide que no se utilice el nombre de Dios para fomentar las guerras, porque “las religiones no pueden utilizarse para la guerra”.
Escuchemos al Papa Francisco y hagamos nuestras sus peticiones para reforzar los cimientos del futuro de nuestro mundo.