¿Por qué Nicaragua se quedará sin monjas y religiosas?

Leer más
COLUMNA

Cultura Bíblica

Evangelio 3 de septiembre 2023: Elección radical

Jesús cita el día de su venida y anuncia que los hombres serán juzgados “según sus obras”.

31 agosto, 2023

Evangelio 3 de septiembre 2023, según san Mateo (16, 21-27)

En aquel tiempo, comenzó Jesús a manifestar a sus discípulos que tenía que ir a Jerusalén y padecer allí mucho por parte de los ancianos, sumos sacerdotes y escribas, y que tenía que ser ejecutado y resucitar al tercer día. Pedro se lo llevó aparte y se puso a increparlo: «¡Lejos de ti tal cosa, Señor! Eso no puede pasarte».

Jesús se volvió y dijo a Pedro:
«Ponte detrás de mí, Satanás! Eres para mí piedra de tropiezo, porque tú piensas como los hombres, no como Dios».

Entonces dijo a los discípulos:
«Si alguno quiere venir en pos de mí, que se niegue a sí mismo, tome su cruz y me siga. Porque quien quiera salvar su vida, la perderá; pero el que la pierda por mí, la encontrará. ¿Pues de qué le servirá a un hombre ganar el mundo entero, si pierde su alma? ¿O qué podrá dar para recobrarla? Porque el Hijo del hombre vendrá, con la gloria de su Padre, entre sus ángeles, y entonces pagará a cada uno según su conducta.»

Elección radical

Después de que nuestro señor Jesucristo recabó de parte de sus discípulos más cercanos el reconocimiento como el “Mesías, el Hijo de Dios Vivo”, Jesús inicia la exposición sobre aquello en que habría de consistir su misión mesiánica.

Precisamente, en el Evangelio de este 3 de septiembre 2023 leemos la primera vez que Jesús anuncia su Pasión, Muerte y Resurrección. Si miramos el pasaje de la confesión de fe de Simón Pedro (Mt 16,15-20) que leímos la semana pasada, y la narración de hoy, salta a la vista el contraste de las respuestas de Pedro. En el primer pasaje, Pedro acierta en lo que dice y recibe una Bienaventuranza. En cambio, después del primer anuncio de la Pasión, Pedro recibe una reprimenda puesto que su intervención no es según los criterios de Dios, sino de los hombres.

El profeta Isaías en la tercera parte de su libro contiene este oráculo: “De la misma manera que sobrepasan los cielos a la tierra… mis pensamientos rebasan a los de ustedes” (Is 55,9). Simón Pedro trató de corregir a Jesús porque le parecía inadecuado lo que anunciaba, su Pasión, Muerte y Resurrección.

Pero Jesús lo corrigió: “Aléjate, Satanás, porque tu no piensas como Dios, sino como los hombres”. Acto seguido, el Señor enuncia los criterios para seguirlo, básicamente tiene que ver con una elección radical por Él, dejando aparte la búsqueda de resolver la propia vida. El criterio de Jesús, el Mesías e Hijo de Dios vivo, es que no pretenda uno ganar la propia vida.

Y este criterio será el que deberá respetarse para el juicio final. Podemos poner como ejemplo el discurso sobre el juicio final en el mismo Evangelio de san Mateo, el Señor dice que “todo lo que le hicieron al más pequeño, a Él se lo hicieron” (cfr. Mt 25, 40), esto se encuentra en consonancia con el mandato de no pretender ganar la propia vida, sino perderla por el Evangelio. Tal vez sea este el motivo por el cual, al final del discurso que leemos el día de hoy, Jesús cita el día de su venida y anuncia que los hombres serán juzgados “según sus obras”.

Mons. Salvador Martínez Ávila es biblista y Rector de la Insigne y Nacional Basílica de Guadalupe.