Qué es lo verdaderamente lo que ha hecho la autollamada “Cuarta transformación” en los últimos seis años y en lo que va del presente sexenio: destruir lo que nos daba estabilidad social y fortaleza estructural para un desarrollo auténtico para superar la pobreza, mejorar la educación y generar mejores oportunidades de inversiones, empleo, educación y seguridad social.

Efectivamente, acabaron de un plumazo con los organismos autónomos que regulaban el ejercicio del poder y exigían rendición de cuentas a los gobernantes, anularon la división de poderes arrebatando ilegalmente la mayoría en el Congreso y destruyeron cínicamente el Poder Judicial.

¿Cómo han podido lograr todo esto contra la voluntad de la mayoría de los mexicanos? Con una consistente política pública de subsidios populares entregando directamente en mano recursos económicos a diversos sectores de la sociedad con fines electorales. Por supuesto que algunos están perfectamente justificados como son los que corresponden a las personas mayores y a los discapacitados por diferentes causas, es un acto de elemental justicia social.

Pero no se puede justificar de ninguna manera la inmoral entrega de dinero económico a los jóvenes que requieren educación y trabajo y no dádivas, tampoco a los niños y adolescentes, que requieren de una educación pública verdaderamente gratuita y de calidad, contando además con escuelas de tiempo completo y programas de alimentación, formación cultural y deportiva que les aleja de la delincuencia y
los vicios.

No debemos olvidar que la mayoría de los actuales gobernantes son fruto de un sistema fraudulento. Solamente con una fuerte conciencia ciudadana y un claro compromiso de todos los mexicanos podremos recuperar nuestro país democrático, unido y con nuestra identidad nacional.

*Los artículos de opinión son responsabilidad del autor y no necesariamente representan el punto de vista de Desde la fe.

Pbro. Mario Ángel Flores

Comisionado de la Doctrina de la Fe en la Arquidiócesis Primada de México y miembro de la Comisión Teológica Internacional (CTI). Es director del Observatorio Nacional de la Conferencia del Episcopado Mexicano y fue rector de la Universidad Pontificia de México, cargo que ocupó durante tres trienios.

Entradas recientes

La alegría y la luz de la Navidad

Jesús nace en la noche, indicando así que viene a las tinieblas de nuestro corazón…

28 minutos hace

Prejuicios contra los pobres

Al acercarnos a Navidad, en que celebramos al Verbo eterno del Padre encarnado en un…

43 minutos hace

Jornada Mundial de la Paz 2026: el Papa llama a una paz “desarmada y desarmante”

El Papa León XIV presenta las claves para trabajar por la paz en el mundo…

2 horas hace

18 de diciembre: la Iglesia recuerda a San Modesto, restaurador de los templos de Jerusalén

San Modesto de Jerusalén dedicó su vida a reconstruir los Santos Lugares y fortalecer la…

2 horas hace

¿Qué hago con mis miedos cuando no me dejan avanzar?

Actualmente, los miedos responden más a la sensación de un vacío existencial, el cual resulta…

5 horas hace

Fantasía con sentido católico: Rodrek y el poder de la fe, la esperanza y el amor

Rodrek, la novela de Miguel Gaviño, narra una aventura de fantasía épica donde la fe,…

5 horas hace