La fe y el compromiso familiar contra la violencia
En el Consejo Ciudadano apoyamos a las familias a empoderarse y fortalecer para salir de cualquier círculo de violencia o para encontrar soluciones.
Coordinador del Centro de Comando, Control, Cómputo, Comunicaciones y Contacto Ciudadano de la Ciudad de México (C5 CDMX).
Las familias son verdaderas iglesias, porque en ellas se forja una convivencia con ciertos valores con un fin común: protegerse y ayudarse. Sin embargo, hay algunas que necesitan un apoyo superior para liberarse de problemáticas que las dañan: violencia, falta de acuerdos, rupturas.
San José es el patrono de la familia, pues reunió todas las virtudes: comprendió y cuidó a María, se dedicó con empeño a la educación de Jesús, y él mismo era un ejemplo de tesón y compromiso. A él recurrimos cuando hay una situación que vulnera el hogar.
Aunque en ocasiones es necesario acudir a especialistas que nos hagan ver que podemos cambiar nuestras actitudes, reforzar la convivencia positiva y transformar nuestro entorno.
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Fue el caso de la familia Madrid, cinco personas que viven en un mismo hogar en Iztapalapa. Tras vivir por años violencia, principalmente de uno de sus integrantes, decidieron cambiar.
Acudieron en conjunto a uno de los talleres de Violencia Familiar que brindamos en el Consejo Ciudadano, en nuestra sede en Luis Hidalgo Monroy #100, en Barrio San Pablo. En 12 sesiones, con distintas actividades para que cada uno, encontraron herramientas para establecer límites, cambiar su manera de ser, tener una comunicación asertiva, fuerza y decisión.
Blanca nos compartió que, gracias a este taller, entendió que sí había salida de cualquier tipo de violencia. Un día en que todos tomaban su desayuno, entendieron que, para cambiar realmente, debían poner en práctica lo compartido por nuestras psicólogas y psicólogos. El agresor decidió modificar sus conductas. Su agradecimiento y palabras nos llegaron hasta el alma.
Construir una convivencia familiar sana no sucede por arte de magia, ni en poco tiempo, ni con una plática. Es un trabajo constante. Requiere de fe, sí, pero sobre todo de compromiso. Aceptar que hay un problema y acercarnos a los canales disponibles para reconstruir los aspectos positivos que nos mantienen unidos.
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Si en tu casa hay una situación difícil, problemas o maltrato de cualquier tipo, no dudes en hablar. En el Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la Ciudad de México les apoyamos a empoderarse, a fortalecer su mente y su espíritu para salir de cualquier círculo de violencia o para solucionar lo que sea necesario.
Llama a la Línea Mujer y Familia o al Chat de Confianza 55 5533-5533, te escuchamos y te ayudamos.
*Salvador Guerrero Chiprés (@guerrerochipres) es Presidente del Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la Ciudad de México.
Los textos de nuestra sección de opinión son responsabilidad del autor y no necesariamente representan el punto de vista de Desde la fe.
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