“¿Y si Dios existe, qué?” El mensaje oculto detrás de los letreros distribuidos por toda la CDMX
En semanas últimas comenzaron a aparecer espectaculares en la CDMX con esta inscripción: “¿Y si Dios existe, qué?”. Aquí la razón.
En semanas últimas comenzaron a aparecer en la Ciudad de México letreros espectaculares en rojo y blanco con la siguiente inscripción: “¿Y si Dios existe, qué?”. Esto llenó de extrañeza a miles de ciudadanos por dos razones: la primera: ¿por qué alguien se habría ocupado en colocar dichos letreros por todas partes?, y la segunda: ¿qué querría decir esa expresión?, o dicho de otro modo, ¿lo anunciado estaría en contra o a favor de Dios?
La frase “¿Y si Dios existe, qué?”, colocada en distinto puntos de la CDMX, ha dejado pensativos a incontables transeúntes que circulan por conocidas vías de la capital de la República, como Periférico Sur, Avenida Patriotismo, Avenida Revolución, Tacubaya, La Villa, Circuito Interior y otras.
Si tú eres de los que se preguntan a qué responde dicha expresión colocada por toda la ciudad, aquí te tenemos la respuesta.
El vacío de Dios
La expresión “¿Y si Dios existe, qué?”, responde a la reciente visita a la Ciudad de México de Oliver Bonnassies, un hombre de nacionalidad francesa que, habiendo alcanzado el éxito en su juventud, se sentía vacío interiormente. A tal punto, comenzó a cuestionarse su propia existencia: ¿De qué le servía tener negocios bien cimentados a sus 20 años? ¿Por qué no le causaba emoción el haber concluido una carrera universitaria tan joven? ¿Por qué ni su pasión por la ciencia ni el éxito económico le aportaban la felicidad que pensaba que le dejarían?
Oliver Bonnassies platica que en su casa Dios jamás fue un tema de conversaciones, de manera que él no creía en la existencia de un ente creador del mundo. Hasta que cierto día en que le ocurrió algo inesperado…
Sucedió que llegó a sus manos un libro de un teólogo, y lo abrió con la intención de encontrar alguna falla lógica en sus postulados. “Pensaba que hallaría el error en cuestión de minutos -dice-, pero no ocurrió así. Lo analicé por semanas, meses, un año, dos, y no encontré ningún error. Lo que estaba diciendo el hombre en esas páginas era completamente sólido”.
Tras ese largo análisis de aquel libro, Oliver Bonnassies se dio a la tarea de estudiar Teología durante cuatro años para tratar de profundizar en la materia. Y fue durante ese periodo que experimentó una conversión.
¿Y si Dios existe, qué?
Esta expresión que aparece por distintos puntos de la CDMX es el título de un libro que Oliver Bonnassies comenzó a escribir hace más de un lustro en colaboración con Michel-Yves Bolloré. Este último se desempeña como ingeniero en Informática, pero también ha desarrollado un enorme interés por las cuestiones teológicas.
Para escribir “¿Y si Dios existe, qué?”, Oliver Bonnassies y Michel-Yves Bolloré realizaron una investigación exhaustiva durante casi cuatro años, apoyados de una veintena de especialistas en diversos campos científicos.
¿De qué trata el libro?
Para Oliver Bonnassies, durante milenios el desarrollo científico caminó de manera paralela a las perspectivas religiosas. Sin embargo, durante los siglos XIX y XX ese diálogo entre lo trascendente y lo terrenal se vio interrumpido por algunos postulados cientificistas. Y de manera particular por las teorías de Karl Marx, que pusieron una falsa barrera entre la fe y el conocimiento de la ciencia.
“Esta falsa ruptura entre la fe y la ciencia -dice Oliver Bonnassies-, la hemos visto y escuchado en prácticamente todos los espacios de diálogo social. Y en el fondo, se encuentra en los cimientos de la crisis antropológica contemporánea, la cual vuelve imposible el diálogo profundo y significativo sobre nuestra compleja naturaleza”.
Por tal razón, en “¿Y si Dios existe, qué?” los autores plantean un debate directo, pero respetuoso y generoso, con quienes opinan que Dios no es compatible con la ciencia. Los autores aseguran que lo que la religión y la filosofía plantean sobre lo trascendente, la ciencia hoy lo ratifica.
“¿Y si Dios existe, qué?”, es un título que reta a los lectores a refutar los argumentos científicos que se plantean sobre la existencia de un Dios creador. No es un libro que hable de religión, sino que aborda la existencia de un principio creador desde un plano científico.