¿Quién fue San Nicolás de Tolentino, el patrono de las almas del Purgatorio?
Cada 10 de septiembre, la Iglesia celebra a San Nicolás de Tolentino, santo agustino cuya vida de oración y caridad lo convirtió en intercesor por las almas del purgatorio.
San Nicolás de Tolentino, sacerdote agustino del siglo XIII y patrono de las almas del purgatorio, conocido por sus misas tolentinas y su vida de oración y caridad. Foto: Especial
Cada 10 de septiembre, la Iglesia recuerda a San Nicolás de Tolentino, sacerdote agustino considerado el primer santo de la Orden de San Agustín. Su vida estuvo marcada por la oración, la austeridad y una intensa dedicación pastoral, que lo convirtieron en patrono de las almas del purgatorio y protector de los más necesitados.
¿Por qué es patrono de las almas del purgatorio?
San Nicolás de Tolentino, que vivió en el siglo XIII, tuvo una experiencia mística que lo convirtió en patrono de las almas del purgatorio. Cuenta la historia que un sábado por la noche, después de prolongada oración, se encontraba en su lecho queriendo dormir cuando escuchó una voz lastimera.
“Nicolás, Nicolás, mírame si todavía me reconoces. Yo soy tu hermano y compañero Fray Peregrino. Hace largo tiempo que sufro grandes penas en el purgatorio. Por eso, te pido que ofrezcas mañana por mí la santa misa para verme por fin libre y volar a los cielos… Ven conmigo y mira”.
El santo lo siguió y vio una llanura inmensa cubierta de innumerables almas, entre los torbellinos de llamas purificadoras, que le tendían sus manos, llamándolo por su nombre y pidiéndole ayuda. Conmocionado, Nicolás refirió la visión a su Superior, quien le dio permiso celebrar la misa durante varios días por las almas del purgatorio.
A los siete días, se le apareció de nuevo Fray Peregrino, ahora resplandeciente y glorioso, acompañado de otras almas para agradecerle y demostrarle la eficacia de sus súplicas. De esta experiencia surge la devoción del septenario de San Nicolás, es decir, mandar celebrar siete días consecutivos la misa por las almas del purgatorio.
Finalmente, el Papa León XIII lo declaró Patrono de las Ánimas del Purgatorio en 1884, reconociendo su celo extraordinario por los difuntos.
San Nicolás de Tolentino (1245-1305), sacerdote agustino conocido por su vida de oración, caridad y su intercesión por las almas del purgatorio. Foto: Especial
¿Quién fue san Nicolás de Tolentino?
Nacido en 1245 en Sant’Angelo in Pontano, Italia, Nicolás ingresó siendo niño en los agustinos de su pueblo natal como estudiante y novicio, y fue ordenado sacerdote alrededor de 1273. Poco después fue destinado a Tolentino, ciudad con la que su nombre quedó íntimamente ligado, donde vivió y sirvió por más de 30 años, hasta su muerte el 10 de septiembre de 1305.
San Nicolás no destacó por sus escritos, sino por su predicación sencilla, dedicación pastoral y cercanía a los pobres y enfermos. Recorrió barrios humildes, visitó moribundos y atendió necesidades materiales y espirituales. Su vida equilibraba contemplación y acción apostólica, siendo austero y místico, pero cordial con el pueblo. En sus últimos días, cuando le preguntaron por qué estaba tan alegre, respondió:
“Porque mi Dios y Señor Jesucristo, acompañado de su Santa Madre y de mi Santo Padre Agustín, me está diciendo: ‘¡Vamos! Siervo bueno y fiel, entra en el gozo de tu Señor’”.
Las Misas Tolentinas son un septenario, es decir, siete misas ofrecidas por un difunto, un privilegio de la Orden Agustiniana. Pueden celebrarse simultáneamente en un mismo día en un templo con siete altares contiguos, siempre con autorización del Prior General.
Su origen se relaciona con la visión de Fray Peregrino, que confirmó el poder espiritual de la intercesión de San Nicolás. Esta tradición, comparable a las misas gregorianas, es reconocida por la Santa Sede por sus indulgencias y frutos espirituales.
San Nicolás de Tolentino, patrón de las almas del purgatorio, intercede por los difuntos y enseña la importancia de la oración constante y devota. Foto: Especial
¿Cuál es la oración de san Nicolás de Tolentino para las ánimas del Purgatorio?
¡Oh glorioso Taumaturgo y Protector de las almas del purgatorio, San Nicolás de Tolentino! Con todo el afecto de mi alma te ruego que interpongas tu poderosa intercesión en favor de esas almas benditas, consiguiendo de la divina clemencia la condonación de todos sus delitos y sus penas, para que saliendo de aquella tenebrosa cárcel de dolores, vayan a gozar en el cielo de la visión beatífica de Dios. Y a mí, tu devoto siervo, alcánzame, ¡oh gran santo!, la más viva compasión y la más ardiente caridad hacia aquellas almas queridas.
Periodista con más de 20 años de trayectoria, titulada de la Escuela de Periodismo Carlos Septién García. A lo largo de su carrera ha colaborado en reconocidos medios nacionales como Milenio, El Gráfico de El Universal, Revista Alto Nivel y Desde la fe, entre otros. Su trabajo se ha enfocado en temas sociales, culturales y de interés humano, con un compromiso constante por informar con profundidad y sensibilidad.