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San Judas Tadeo no protege delincuentes ni hace milagros

Ante la visita de una reliquia de san Judas Tadeo a México, el padre Tharcisse Rukundo advierte sobre una falsa devoción al santo.

18 julio, 2024
San Judas Tadeo no protege delincuentes ni hace milagros
San Judas Tadeo, conocido también como el “santo de las causas difíciles y desesperadas”. Foto: DLF

Por petición de la Embajada de México en la Santa Sede, una reliquia en primer grado de san Judas Tadeo -un hueso de uno de sus brazos-, llegará a México y comenzará un recorrido por las diferentes diócesis del país, a partir del 29 de julio, para que pueda ser venerada por los fieles de todo el territorio nacional.

Uno de los templos de la Arquidiócesis de México donde los fieles podrán verla, es la Parroquia de San Judas Tadeo Cuemanco, donde estará expuesta para su veneración los días 3 y 4 de agosto, luego de su paso por la Catedral Metropolitana de México (29 y 31 de julio) y por la Parroquia de San Hipólito (1 y 2 de agosto).

Sobre la importancia del recorrido de la reliquia por las diferentes diócesis de México, el padre Tharcisse Rukundo, párroco de San Judas Tadeo Cuemanco, señaló que se trata de un acontecimiento de gracia debemos aprovechar para alcanzar la unidad nacional, pidiendo la intercesión de este Santo Apóstol que acompañó a Jesús en su vida pública. Pero, ¿qué es y qué no es san Judas Tadeo? ¿qué se le puede pedir y qué no es correcto pedirle a este santo?

La devoción a san Judas en México

El padre Tharcisse Rukundo señala que san Judas Tadeo es un santo cuya devoción llegó y se difundió aceleradamente en México en la década de los 80, más específicamente en 1982, en un contexto nacional de crisis severa por una complicación en el pago de la deuda externa que ocasionó pérdida de empleos y muchas familias comenzaron a vivir una situación desesperada.

Frente a este panorama nacional, la devoción a san Judas Tadeo, introducida a México por los padres claretianos, representó un singo de esperanza para esas familias, especialmente por su fama de intercesor para las causas difíciles y desesperadas. Fue entonces que personas de bien, que pasaban por una situación complicada, apelaron a su intercesión, y el santo fue ganando fama.

Sin embargo, otro tipo de devotos también comenzaron a acudir a él: personas relacionadas con actividades delictivas, que fueron tomando como punto de encuentro el Templo de San Hipólito de la Ciudad de México. La devoción entonces se fue desviando hacia prácticas ajenas al cristianismo. “Lo cual es necesario ir corrigiendo, para que la devoción a san Judas Tadeo sea una devoción con la marca del cristianismo, y que la Comunión de los Santos sirva a los vivos para poder dirigir su vida al encuentro con el Señor.

¿Qué NO es san Judas Tadeo?

No es un santo que obra milagros; los milagros los hace Dios
No hace magia ni ayuda a cometer delitos
No protege a ladrones ni es amuleto contra el mal
No es Judas Iscariote el traidor

¿Qué SÍ es san Judas Tadeo?

Sí fue un Apóstol fiel a Jesús
Sí anuncio el Evangelio y fue ejemplo de vida
Sí fue un opositor a la corrupción y el paganismo
Sí es un intercesor ante Dios por nuestras necesidades, especialmente si son causas difíciles.

¿Qué podemos pedirle a san Judas?

Para el padre Tharcisse Rukundo, si bien es importante que los fieles le pidamos a san Judas Tadeo por las causas personales, aprovechando el recorrido de su reliquia por el territorio nacional, también sería bueno pedirle por los problemas que enfrenta el país, para que podamos vivir unidos como pueblos, como ciudadanos, como comunidades, ya que “la unidad es el principio de una paz verdadera”.

“Pidámosle que nos ayude a recuperar el amor fraterno y nos ayude a erradicar de nuestras tierras todo aquello que destruye la paz social, a fin de que podamos también alcanzar una paz interna y trabajar por el bienestar de personal y comunitario, tanto físico como espiritual”.

En cuanto a los devotos que suelen hacerle al santo peticiones malsanas, el padre Tharcisse Rukundo señaló que lo primero que deben pedirle los ayude a cambiar el corazón y les infunda el deseo de imitarlo, a fin de dejar a un lado las maldades. “San Judas Tadeo no es un santo que proteja a los maleantes, a los delincuentes, a las personas que quieren hacer daño a otros; sino un santo que quiere mostrarnos el camino hacia Jesús”.



Autor

Editor de la revista Desde la fe/ Es periodista católico/ Egresado de la carrera de Comunicación y Periodismo de la Facultad de Estudios Superiores Aragón.