Obispo de Veracruz: “Pienso en la luz que Veracruz necesita”
Monseñor Carlos Briseño aseguró que liderar la presencia de la Iglesia es un reto que le anima.
Cuando Monseñor Carlos Briseño se enteró de su nombramiento como Obispo de Veracruz se llenó de alegría, pues siempre ha tenido una estrecha relación con el puerto y su gente.
“Me alegré mucho”, aseguró, en entrevista con Desde la Fe, el aún obispo auxiliar de la Arquidiócesis Primada de México.
“Me siento con bastante ánimo. También con preocupación, pues ante lo desconocido no sabemos cómo actuar, pero siento que Dios me ha regalado estos 12 años y medio como auxiliar en los que me he preparado para poder servir”, agregó.
El estado de Veracruz fue el escenario de uno de los escándalos de corrupción más grandes de los últimos años, con un desfalco multimillonario provocado por el exgobernador Javier Duarte de Ochoa, actualmente en prisión. Además, es una de las entidades con mayor índice de homicidios relacionados con el narcotráfico.
“Miedo no me da. El miedo humano es natural, pero en realidad no es que me dé miedo. Mi papel no es tanto ver lo que me pueda pasar a mí, sino más bien lo que yo pueda hacer por los demás, por toda la gente allá y la luz que pueda llevar”.
No obstante -reconoce- la realidad que viven los veracruzanos es preocupante: “por supuesto que me preocupa y lo he pensado, pero precisamente ese es el reto que me da, que nuestra fe nos ayuda a ver las cosas de manera distinta, nos ayuda a ver siempre cualquier realidad con un sentido sobrenatural, positivo y constructivo, y eso nos permite ayudar a los demás a ir hacia adelante”.
Monseñor Briseño tomará posesión de su nueva diócesis el 10 de enero de 2019, en sustitución de Luis Felipe Gallardo Martín del Campo, quien presentó su renuncia al Papa Francisco hace más de un año.
Aunque acepta que extrañará la diócesis de México y, en especial, la II Vicaría, donde laboró los últimos años, no es un sentimiento de nostalgia lo que deja atrás, sino de agradecimiento por los años de cariño y aprendizaje.
“El camino del Obispo es siempre seguir a Dios (…) claro que la extrañaré, la recordaré con mucho cariño por todo lo que aquí aprendí, pero siempre me gusta ver hacia adelante”.
Carlos Briseño fue ordenado sacerdote el 27 de septiembre, en Querétaro, con la congregación de los Agustinos Recoletos. En 2006, el Papa Benedicto XVI lo nombró Obispo Auxiliar de la Arquidiócesis de México.