CEM prepara diagnóstico completo sobre casos de abusos sexuales

La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) anunció que prepara un diagnóstico completo sobre los casos de abuso sexual a menores perpetrados por sacerdotes y religiosos en el país.

En un comunicado, el secretario general del organismo, Alfonso Miranda Guardiola, explicó que desde el 7 de enero pasado se instaló el Equipo Nacional de Protección de Menores, que se enfrentó a “la ausencia de una estadística nacional  de casos de abuso sexual infantil por parte de clérigos”, por lo que tiene la encomienda de recopilar la información necesaria para ello.

“Los primeros datos recibidos, y que fueron hechos del conocimiento público en días pasados por el Presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano, Rogelio Cabrera López, con la  finalidad de iniciar un camino de transparencia de cara a la sociedad, fueron los proporcionados por la Nunciatura Apostólica en México, que tiene el registro de 152 casos de sacerdotes relacionados con probables conductas cometidas en agravio de menores”.

“Evidentemente, en los siguientes meses se continuará con el esfuerzo por tener el diagnóstico completo de casos de abuso sexual infantil en México”, explica monseñor Miranda Guardiola.

No obstante, señaló, por mandato constitucional y por respeto a los tratados internacionales, la CEM no dará a conocer los datos personales de las víctimas ni de los presuntos responsables, por respeto a quienes sufrieron un abuso, y para no poner en riesgo las investigaciones.

“La Iglesia está, hoy más que nunca, cooperando con las autoridades del país, especialmente en los casos de abuso contra menores por parte de clérigos, de conformidad con las leyes mexicanas. La sociedad y los miembros de la Iglesia lo exige, pues no podemos permitir un caso más”.

Los obispos de México, agrega el texto, han llevado a cabo diversas acciones para combatir la pederastia clerical, entre ellas, la elaboración de las Líneas Guía del Procedimiento a Seguir en Casos de Abuso Sexual de Menores por Parte de Clérigos, del Protocolo de Protección de Menores y trabajos de capacitación y asesoría tanto para los obispos como para los voceros de las diversas diócesis del país.

“El abuso sexual a menores constituye una de las realidades más dolorosas de la Iglesia católica en el mundo; sin embargo, con estas acciones concretas, claras, transparentes y contundentes deseamos recuperar la confianza de los fieles y lograr que la Iglesia continúe con su misión evangelizadora con un rostro limpio, luminoso y confiable, como el de nuestro Señor Jesucristo”, finalizó.

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