El Vaticano pide no encubrir abusos por miedo al escándalo
En el Encuentro sobre la Protección de Menores se discutió la rendición de cuentas.
La Iglesia no debe encubrir abusos por miedo al escándalo, ya que su deber es acompañar a las víctimas, por lo que debe existir una cultura de la denuncia dentro de la Iglesia, coincidieron el Papa y organizadores del Encuentro sobre la Protección de los Menores durante el segundo día de actividades de la reunión que lleva a cabo en el Vaticano.
El inicio de las actividades del día fue marcado por un tuit del Papa Francisco en el que expresaba su apoyo a la justicia para las víctimas: “Señor, líbranos de la tentación de querer salvar nuestra reputación y a nosotros mismos; ayúdanos a asumir la culpa y a buscar juntos respuestas humildes y concretas, en comunión con todo el Pueblo de Dios”, señala el mensaje.
Posteriormente fue el Arzobispo de Chicago, Blase J. Cupich, quien su intervención respaldó que acompañar a las víctimas de abuso exige una mentalidad que rechaza categóricamente los encubrimientos por razones legales o por miedo al escándalo.
“Nuestra escucha no puede ser pasiva, esperando que aquellos que han sido abusados encuentren un camino hacia nosotros. Más bien, nuestra escucha debe ser activa, buscando a quienes han sido heridos y tratando de servirlos. Nuestra escucha debe estar dispuesta a aceptar el desafío, la confrontación e incluso la condena de los fracasos pasados y presentes de la Iglesia en mantener a salvo lo más precioso del rebaño del Señor”, declaró.
En la apertura del segundo día de trabajo de este encuentro, el Cardenal Oswald Gracias, Arzobispo de Bombay, ex Presidente de la Conferencia Episcopal de la India dijo que en la Iglesia han tenido dificultades para afrontar la cuestión del abuso de modo correcto.
Por esta razón, Gracias se preguntó si los obispos se empeñan en “realmente mantener una conversación abierta, señalando honestamente a sus hermanos obispos o sacerdotes frente a un comportamiento problemático”.
Dijo que la exhortación es a “cultivar la cultura de la correcto fraterna” y, al mismo tiempo, considerar “las críticas de un hermano como una oportunidad para realizar mejor nuestros deberes, admitiendo personalmente los errores unos con otros y pidiendo ayuda sin pretender ser perfectos manteniendo. Explicó que “no debemos preocuparnos por dañarnos a nosotros mismos, aunque demostremos ‘debilidad’, sino tener la humildad de hacerlo”.
Rendición de cuentas
En su ponencia, Cupich basó su presentación en una serie de propuestas para aumentar los procedimientos de rendición de cuentas dentro de la Iglesia y mejorar los procesos frente a las acusaciones de abusos sexuales a miembros del clero. “Estas estructuras de rendición de cuentas también deben ser justas y seguras, produciendo sanciones para proteger a los vulnerables cuando el acusado es culpable, y declaraciones de inocencia cuando el acusado no tiene culpa”, agregó Cupich.
“Si la Iglesia ha de acoger verdaderamente a las víctimas y sobrevivientes del abuso clerical en sus brazos como una madre amorosa, entonces toda estructura de rendición de cuentas debe incluir un compromiso y un acompañamiento que sean verdaderamente compasivos”, agregó.
En este sentido, el arzobispo Gracias dijo que debe haber una “comunicación clara, transparente y coherente con las víctimas, con los miembros de la Iglesia y con la sociedad en general”.
Dijo que habrá varios mensajes, en especial dirigidos a las víctimas, con una solidaridad respetuosa y el reconocimiento honesto de su dolor y sufrimiento. “También habrá otro que contenga una propuesta de sanación, desde el asesoramiento profesional hasta el apoyo a grupos de coetáneos, y otros medios, desarrollando tales vías de sanación para señalarlos también a aquellos que están haciendo el mal”.
Con información Manuel Cubías, Vatican News
Lee también: Hay 11 principios que la Iglesia debe seguir ante un caso de abuso: Cupich