Fieles participarán en la vigilia nocturna en la Catedral Metropolitana, previa al cierre de la Puerta Jubilar. Foto: María Langarica
A unos días del cierre de la Puerta Jubilar, la Catedral Metropolitana de la Ciudad de México anunció que realizará una vigilia de oración, por lo que permanecerá abierta durante la noche del 27 al 28 de diciembre, para ofrecer a los fieles una jornada especial de adoración ante Jesús Sacramentado, esto en el marco de la conclusión del Año Jubilar de la Esperanza.
De acuerdo con información de la Catedral Metropolitana, esta vigilia estará coordinada por Adoración Nocturna Mexicana, cuyos miembros propusieron el esquema que acompañará la oración continua durante toda la noche.
El Cabildo Metropolitano, los equipos de seguridad y el personal de apoyo trabajarán conjuntamente para garantizar un ambiente seguro y adecuado para la oración, tanto para los asistentes como para el resguardo del inmueble histórico.
La jornada comenzará a las 21:00 horas del día 27 de diciembre con el rezo de las Vísperas, presidido por el Cabildo Metropolitano. A lo largo de la noche habrá espacios de adoración con cantos, meditaciones y oración guiada.
La vigilia concluirá al día siguiente con la bendición y posteriormente con la celebración de la Santa Misa a las 08:00 horas, con la que se dará paso al cierre simbólico de la Puerta Jubilar de la Catedral Metropolitana.
La Coordinación General de la Adoración Nocturna recomienda que quienes asistan lo hagan con una preparación previa espiritual y física para vivir un periodo prolongado de oración, resaltando que no es obligatorio el permanecer toda la noche, sino el tiempo que cada uno de ellos destine para participar.
La intención es que este encuentro sea un espacio para la oración personal, la convivencia fraterna y las obras de misericordia.
Habrá momentos de silencio, oración guiada y adoración prolongada. Cada fiel podrá vivirlos según sus posibilidades, con la finalidad de entrar en un encuentro profundo con el Señor en una ocasión única en el año jubilar.
Asimismo, los coordinadores estiman la presencia de entre 200 y 250 adoradores, además de los fieles que espontáneamente se sumen durante la noche.
La apertura de una Puerta Santa ocurre cada 25 años o en momentos especiales. Cruzarla, señalan autoridades de la Catedral, es más que un gesto simbólico, pues significa acoger la gracia del amor de Dios y renovar la esperanza en la salvación ofrecida en Cristo. Por lo que la noche del 27 se convierte en la última oportunidad del año para atravesarla antes de su cierre el 28 de diciembre.
Para esta vigilia se implementarán accesos controlados, de acuerdo con información de la Catedral Metropolitana:
Ambos puntos estarán resguardados por elementos de la Guardia Nacional y personal de la Catedral. Además, se conformó una comisión de apoyo para mantener el orden y el ambiente de oración.
Las zonas abiertas serán exclusivamente el Altar Mayor y el espacio inmediato destinado a adoradores y participantes. El resto del templo permanecerá cerrado.
La Iglesia, explican los organizadores, vela durante la noche para adorar a Dios en nombre de toda la comunidad, agradeciendo el don de la Eucaristía y la presencia constante de Cristo. Inspirados en el Evangelio del Primer Domingo de Adviento, que exhorta a “velar y estar preparados”, esta vigilia busca imitar a Cristo adorador del Padre: permanecer en oración durante la noche para rendir culto, pedir su gracia y reconocer su sacrificio y su presencia real en la Eucaristía.
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