¿Quién fue Pablo VI? Uno de los nuevos santos canonizados por el Papa
Carlos Villa Roiz Tras la muerte de Juan XXIII, en 1963 fue electo como Papa el Cardenal Giovanni Battista Montini, quien adoptó el nombre de Pablo VI, y quien gobernó a la Iglesia por 15 años, hasta 1978. Su pontificado tuvo tal relevancia que sus sucesores se hicieron llamar Juan Pablo I y Juan Pablo […]
Carlos Villa Roiz
Tras la muerte de Juan XXIII, en 1963 fue electo como Papa el Cardenal Giovanni Battista Montini, quien adoptó el nombre de Pablo VI, y quien gobernó a la Iglesia por 15 años, hasta 1978. Su pontificado tuvo tal relevancia que sus sucesores se hicieron llamar Juan Pablo I y Juan Pablo II, como un reconocimiento a los dos pontífices antecesores.
Las primeras acciones de Pablo VI estuvieron encaminadas a dar continuidad al Concilio Ecuménico Vaticano II que había iniciado Juan XXIII y en el que participaron 2,450 obispos provenientes de los cinco continentes, el cual concluyó el 8 de diciembre de 1965. Este evento arrojó importantes documentos que dieron vigor a las actividades de la Iglesia frente al mundo moderno y luego fueron incontables los esfuerzos pontificios por llevarlos a la práctica.
Sensible a los signos de los tiempos, Pablo VI fue el primer Papa del siglo XX en salir del Vaticano y comenzó a viajar por el mundo marcando un camino de internacionalización de la Iglesia. Estuvo en Uganda, África; India, Estambul, Suiza, Portugal, Filipinas -donde sufrió un atentado contra su vida-, Australia, y fue el primer Pontífice en estar en el continente americano, ya que en 1965 habló ante el foro de las Naciones Unidas, en Nueva York. “No más guerra, nunca más guerra. Paz, es la paz que debe guiar los destinos del pueblo y de toda la humanidad”, dijo. Luego, en 1968, viajó a Bogotá, Colombia para reunirse con los obispos latinoamericanos.
Mención especial requiere su viaje a Tierra Santa en 1964, donde abrió importantes puertas a la fraternidad con la Iglesia Ortodoxa, pero también al ecumenismo y al diálogo interreligioso.
San Pablo VI también fue el primero en enviar un mensaje de paz al espacio exterior, durante la Misión del Apolo II de la NASA que llegó a la Luna.
Escribió ocho importantes Encíclicas. Entre ellas la Humanae Vitae– 25 de julio de 1968-, sobre el control de la natalidad donde se pronunció enérgicamente a favor de la vida humana. Así como como Ecclesiam Suan, Mysterium fidei, Christri Matri, Populorum Progressio y Sacerdotalis caelibatus, o la Exhortaión apostólica Evangeli muntiandi de 1975, en donde habló del justo desarrollo de los pueblos.
San Pablo VI celebró seis consistorios en los que se promovieron a 143 cardenales; e hizo importantes reformas a la vida eclesial.
Falleció el 6 de agosto de 1978, en el palacio veraniego de Castel Gandolfo, y su proceso de beatificación lo inició San Juan Pablo II el 11 de mayo de 1993, para ser beatificado por el Papa Francisco el 19 de octubre de 2014, ceremonia a la que también asistió el Papa Emérito Benedicto XVI, en Roma.
Los milagros que se le atribuyen
El primer milagro que se atribuye a la intercesión de Pablo VI, y por el que fue beatificado, se trató de la curación de un feto en California, después de que a la madre se le informó que el niño tenía problemas cerebrales. El bebé nació sano.
El segundo milagro fue la curación de un bebé en el vientre de su madre. Ocurrió en Verona, Italia, donde una mujer que tenía un embarazo difícil y con riesgo de aborto rezó al beato en el Santuario de las Gracias ubicado en Brescia, ciudad natal de Giovanni Battista Montini. La niña, llamada Amanda, nació sin problemas.