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COLUMNA

Columna invitada

Los abuelitos de Jesús

Así como Santa Ana y San Joaquín fueron la fuente de la que provino Jesús, nosotros provenimos de nuestros adultos mayores y hoy podemos hacer su vida mejor.

27 agosto, 2022
Los abuelitos de Jesús
Doctor Salvador Guerrero Chiprés
POR:
Autor

Coordinador del Centro de Comando, Control, Cómputo, Comunicaciones y Contacto Ciudadano de la Ciudad de México (C5 CDMX). 

Jesús tenía a sus abuelitos, Santa Ana y San Joaquín, padres de María. Y es gracias a que ellos entregaron su camino a la voluntad de Dios que surgió la línea genealógica del Mesías. Al cumplir su vocación, nos enseñaron el valor de los mayores en nuestras vidas.

 

Según el país en donde estemos, la celebración de los abuelos se conmemora en fecha distinta. Por ejemplo, el día de Santa Ana y San Joaquín, el 26 de julio, marca el festejo en España, mientras que en México, la festividad del Día de la Abuela y el Abuelo es el 28 de agosto,     que coincide con el Día Internacional de la Vejez. Pero, más allá de fechas o latitudes, lo que este día nos invita a considerar es que ellas y ellos son parte importante de nuestra sociedad y que no podemos ignorar sus necesidades.

 

Como nos han hecho saber en las 31,832 atenciones que hemos brindado a este grupo etario entre enero de 2021 y julio de 2022, los mayores de 60 necesitan, entre otras cosas, apoyo para aprender a usar la tecnología. Son 15.1 millones de personas de la tercera edad en México, y muchos han quedado rezagados en el uso de medios digitales. Tanto así, que la mayoría nos contacta a la usanza tradicional, por vía telefónica, y solo el 3% lo hace por WhatsApp.

 

Ayudarles, además de ser una responsabilidad comunitaria, es un acto personal de empatía y comprensión de que todos vamos encaminados hacia esa etapa de la vida en la que llevar el ritmo de los avances puede costarnos más trabajo si no tenemos la guía necesaria para evolucionar junto con el mundo.

 

Cuando leemos “Jóvenes, estad sujetos a los ancianos de manera que seáis todos sujetos unos a otros. Vestíos de humildad de ánimo, porque Dios resiste a los soberbios, y da gracias a los humildes” (1 Pedro 5:5) encontramos una valiosa lección acerca del trato intergeneracional, a partir de la humildad.

 

Cuando no existen esos lazos, en el Consejo Ciudadano de la CDMX los creamos a través del programa de Dignidad Mayor, que atiende con compasión y cariño a las y los adultos mayores que sufren abandono y maltrato. Porque merecen un trato digno, les ofrecemos espacios en los que, sin importar en qué estado de la República o país se encuentren, se sientan escuchados a través de una llamada o WhatsApp al 55 5533 5533.

 

En ese número, que funciona 24/7, es gratis y lo atiende personal capacitado en la atención a nuestros mayores, reciben ayuda psicológica ante situaciones de depresión, ansiedad, violencia familiar, conductas de riesgo suicida o cuando tienen dificultad para expresar sus emociones.

 

Aunque a veces nos distanciamos afectivamente de las personas que nos necesitan, al ver lo que las generaciones previas construyeron para que nosotros podamos avanzar como sociedad, queda claro que jamás debemos ignorarlos. Así como Santa Ana y San Joaquín fueron la fuente de la que provino Jesús, nosotros provenimos de nuestros adultos mayores y hoy podemos hacer su vida mejor.

 

Los textos de nuestra sección de opinión son responsabilidad del autor y no necesariamente representan el punto de vista de Desde la fe.

 

 


Autor

Coordinador del Centro de Comando, Control, Cómputo, Comunicaciones y Contacto Ciudadano de la Ciudad de México (C5 CDMX).