Los obispos invitamos a votar
Nuestro voto es secreto y como tal, debe ser respetado plenamente. Salgamos a votar con responsabilidad y convicción.
MIRAR
Los obispos mexicanos hemos intensificado nuestra invitación a votar el próximo domingo 2 de junio, para que el mayor número posible de ciudadanos participe en las elecciones para la Presidencia de la República, diputaciones federales y senadores, algunas gubernaturas, diputaciones locales y cabildos municipales. No presionamos para que voten por un partido o una coalición, sino por quien libre y conscientemente decidan. Para ello, se han repartido en las parroquias del país carteles y volantes alusivos. Con esto, no violamos las leyes civiles ni canónicas, no alteramos el Estado laico, no nos aliamos con un color partidista. Nuestra fe no se identifica en forma excluyente con un partido y es legítimo que los católicos libremente participen en aquella opción que les parezca mejor para el país.
Uno de los carteles y volantes repartidos, bajo nuestra responsabilidad, dice: Vota. Es un derecho y un deber ciudadano que nos compromete ir a votar. Y ofrece cinco puntos a tomar en cuenta: 1. ¡Piensa en tu voto! Antes de votar, asegúrate de saber bien lo que estás decidiendo. Tu voto es como tu voz, así que úsalo con confianza y sin que nadie te lo quiera quitar. ¡Vota sin miedo y con libertad! 2. Vota pensando en lo mejor para todos. Busca a los que están comprometidos con un México unido. Queremos un país donde se respeten nuestros derechos, donde haya seguridad y justicia para todos. 3. ¡Vota; así puedes exigir! Elige a los candidatos que te representen de verdad y luego recuérdales que cumplan lo que prometieron. 4. ¡Vota libremente y sin condiciones! Confía en lo que dice nuestra Constitución y no atiendas rumores sin fundamento. Los apoyos y programas sociales son un derecho tuyo y de todos los ciudadanos. ¡Tus derechos están protegidos por la ley y nadie te los puede quitar! 5. Todos debemos votar. Anima a tu gente a que vaya a votar el 2 de junio. Que lo hagan sin miedo y con ganas. ¡Por un compromiso por la paz y el bien común! Vota.
El obispo de Cuernavaca, Ramón Castro, secretario general de nuestra Conferencia Episcopal, al encabezar la décima marcha por la paz en esa ciudad, expresó: “Democracia sirve también para castigar por el voto a los malos gobiernos, si no saben, no quieren o no hacen lo que les corresponde”. Esto no es meterse en políticas que no nos correspondan, sino ser críticos y saber a quién apoyar o no con el voto. Si alguien está contento con una determinada forma de gobierno, le apoyará para que continúe; si está inconforme, lo expresará en su voto. Sí sirve votar, aunque algunos digan lo contrario.
DISCERNIR
En un mensaje de nuestra Conferencia Episcopal del 22 de febrero pasado, expresamos: “Esperamos que el Señor nos conceda que este proceso electoral se realice en paz y transparencia, y que todo el pueblo mexicano haga conciencia de su compromiso nacional para que SALGA A VOTAR y elija dirigentes que busquen sinceramente el bien común. Motivamos a cada ciudadano a ejercer el voto de forma libre y razonada el próximo 2 de junio, como expresión de amor a México. Sumemos voluntades, esfuerzos y oraciones para proclamar: “Yo saldré a votar como gesto de servicio, justicia y paz”.
El 3 de marzo pasado, dijimos: “No es tiempo de apatía, indiferencia o abstencionismo. Es tiempo de participación y compromiso. “Exhortamos a todos los ciudadanos, especialmente a los jóvenes a informarse, interesarse y tomar sus propias decisiones buscando el bien de la Nación. Igualmente exhortamos a los partidos políticos y candidatos, para que se conduzcan con ética, con altura de miras y que no pierdan de su horizonte de acción el bien común. Esto incluye la más grande de las actitudes cívicas en democracia que es la participación generosa y la aceptación de los resultados finales. Anhelamos que todo el proceso se realice por cauces legales para evitar conflictos postelectorales innecesarios y costosos, fundados en posiciones arbitrarias y sin sustento”.
El 11 de abril, al concluir nuestra CXVI asamblea plenaria, enviamos este mensaje al Pueblo de Dios: “Nuestro amor por México nos impulsa a invitar a todos los mexicanos mayores de 18 años a que el próximo 2 de junio participen responsablemente con su voto. Como ciudadanos mexicanos responsables pongamos todo lo que esté de nuestra parte para que las próximas elecciones sean pacíficas, libres, conscientes, fiables y con resultados veraces. Unámonos todos los mexicanos que estamos dispuestos a participar responsablemente por construir un México unido, seguro, libre y próspero. Hagamos que nuestro voto razonado y responsable sea escuchado y respetado. ¡Participar votando es una misión que nos toca a todos!”.
Finalmente, el reciente 21 de mayo, insistimos: “La Iglesia es consciente de ser portadora de un mensaje de fraternidad desde el Evangelio de Jesucristo, por lo que está llamada a propiciar el encuentro, el diálogo, el respeto y la reconciliación entre las personas, la sociedad y los países. Como obispos reconocemos el derecho de los ciudadanos a defender sus distintas opciones, pero al mismo tiempo, pedimos conocer y recibir nuestros valores que se basan en el respeto a la vida, a la justicia y al bien común. Es así que invitamos a toda la ciudadanía con credencial de elector, a salir el domingo 2 de junio a votar en libertad por los candidatos de su preferencia, según los puestos de elección popular en contienda. No tengamos miedo de salir a votar, no nos dejemos coaccionar por nadie, ni para votar ni para no salir a votar; ni para hacerlo por dádivas, amenazas o presiones de cualquier tipo. Todos tenemos derecho a votar libremente. Nuestro voto es secreto y como tal, debe ser respetado plenamente. Salgamos a votar con responsabilidad y convicción: salgamos a ejercer nuestros derechos. El próximo 2 de junio será una fiesta cívica de enormes proporciones, jornada de gran trascendencia, realizada desde la alegría de ejercer nuestros derechos, de hacerlo con paz y civilidad, sabiendo que entre todos construimos el futuro del país”.
ACTUAR
Asume tu responsabilidad y colabora con tu voto a construir el país que queremos. Anima a otros y oremos al Señor por la paz y el avance de nuestro pueblo.