Concepto equivocado
Para algunos católicos, los Sacramentos se han vuelto simples eventos sociales.
En la evolución que van sufriendo los lenguajes algunos términos cambian su significado con el uso equivocado, pero constante de la gente. Tenemos el caso de galón, que mucha gente lo usa como sinónimo de recipiente de plástico, pero en realidad es una medida de volumen equivalente a 3.78 litros. En muchas personas hay la idea de que ese término se refiere a cualquier botella grande con asa.
Una ocasión, un padre mandó a su hijo a la tlapalería a comprar gasolina blanca. ¿Cuánto traigo? –preguntó. Y la respuesta fue: “Un galón de los chiquitos”. Un galón siempre es un galón, a menos que se deforme su significado.
Por confusiones, algunos católicos hemos perdido parte del verdadero significado de nuestras creencias. Para algunos, los Sacramentos son simples eventos sociales en los que importa más el salón que el estado de conciencia. La Misa es vista a veces como una rutina con la que hay que cumplir, de preferencia, ocasionalmente. La clase del catecismo y las pláticas pre sacramentales se consideran un mero requisito que hay que aguantar con tal de poder tener una celebración.
Un concepto equivocado lleva a percepciones y resultados inadecuados. Por eso hay quienes retrasan los Sacramentos al no tener dinero para una fiesta fastuosa o los que eligen como padrinos a quienes ni siquiera creen en Dios, pensando más en imagen social que en la Gracia Divina.
Estudiemos bien nuestras creencias para no equivocarnos por tener un concepto erróneo y superficial.