Monjita muestra cómo hacer barra en el gimnasio… con todo y hábito
Con su hábito franciscano, incluido el cordón con los nudos que representan sus votos, esta monja decidió ejercitarse junto con su gemela.
Conoce cómo la monjita realiza su ejercicio en el gimnasio con su hábito
Quien crea que la vida de las religiosas consagradas a Dios supone el solamente orar todo el día y realizar una serie de actividades propias de los monasterios, como elaborar algunos alimentos, está totalmente equivocado y una prueba de ello nos la da una hermana de una orden franciscana de Canadá quien al visitar a su gemela fitness nos demostró su capacidad para hacer barra y diversos ejercicios.
También puedes ver: Cura DJ difunde mensaje del Papa Francisco con música tecno y causa furor
Una monjita que le gusta el gimnasio
Hace unos días Christie Anderson, que vive en Canadá y tiene una conocida cuenta de Instagram donde publica información relacionada con salud, bienestar y ejercicio, publicó un video que se inmediato se viralizó en las redes social, ya que muestra a su hermana vestida con su hábito franciscano acompañándola en diversas rutinas en el gimnasio.
La influencer señaló en un post que fue visitada por su gemela idéntica, quien terminó su noviciado e hizo su primera profesión de votos el pasado 13 de mayo, y aseguró en el mensaje que lo acompaña que “Siempre es una alegría cuando tu hermana viene de visita”, sin mencionar el nombre de ella, ni precisar cuál es la congregación a la que pertenece.
Con su hábito de monja, pero sin olvidar los tenis
Christie aseveró que su gemela fue la que “realmente vino aquí a entrenar un poco”, y sobre el tipo de ropa que utilizaría, es una decisión que “depende de ella si quiere usar el hábito o no”. Así, llegó al gimnasio ataviada con su túnica, escapulario, velo e, incluso, su rosario y su cordón con los tres nudos que representan sus votos de pobreza, castidad y obediencia, y utilizando tenis deportivos.
En el video podemos ver a la hermana franciscana, junto con su gemela, corriendo sobre una banda, posteriormente haciendo una serie de repeticiones en las barras paralelas y, finalmente, recostada haciendo ejercicios con unas mancuernillas, auxiliada por su consanguínea.
Después de ver las imágenes de la religiosa canadiense, ¿seguirás pensando que su vida es monótona y aburrida?