Colegio de San Ildefonso, la huella de los primeros jesuitas

El Antiguo Colegio de San Ildefonso, ubicado en el Centro Histórico de la Ciudad de México, es una de las principales instituciones culturales del país. Desde 1992 que fue creado como museo ha albergado más de 115 exposiciones temporales visitadas por millones de personas, entre ellas las muestras de tesoros artísticos del Vaticano y de museos de Roma.

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Su origen data del siglo XVI cuando los jesuitas realizaban su labor de evangelización en la capital novohispana. En ese momento tenían cuatro seminarios en la ciudad: San Pedro y San Pablo, San Bernardo, San Miguel y San Gregorio.

La congregación vio la necesidad de juntarlos a todos en uno que estuviera bajo la tutela de un solo rector. Así nació el Real y más Antiguo Colegio de San Ildefonso, que empezó a funcionar bajo el Patronato Real de Felipe III.

Al especializarse en educación media, este colegio subsanó la deficiencia que existía en la preparación académica de los jóvenes que deseaban ingresar a la Universidad Real y Pontificia. Además, mejoró la formación de los integrantes de la comunidad jesuita que durante el mismo siglo XVI ya tenían presencia en Pátzcuaro, Oaxaca, Puebla, Zacatecas y Guadalajara en donde fundaron colegios.

El nombre de San Ildefonso le fue dado en honor del santo Arzobispo de Toledo, quien defendió la purísima concepción de la Virgen, como lo ha hecho la Compañía de Jesús desde su fundación.

Ligado a la educación

Desde que los jesuitas llegaron a la Nueva España en 1572, su superior, el sacerdote y doctor Pedro Sánchez tenía el encargo de atender especialmente la educación, tema que también apoyó el virrey Martín Enríquez de Almanza.

Esa misión se mantuvo, ya que el colegio siempre ha estado vinculado a la historia educativa de México, primero con los jesuitas que se mantuvieron 200 años a cargo del edificio, hasta 1767 cuando el rey Carlos III decretó que a la congregación se le expulsara del país. Posteriormente se volvió la Escuela Nacional Preparatoria y finalmente el recinto cultural actual que forma parte del patrimonio de la UNAM.

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Su arquitectura

El inmueble actualmente está compuesto de dos partes, la primera producto de una reedificación a cargo de la Compañía de Jesús en las primeras cuatro décadas del siglo XVIII. Es estilo barroco, tiene tres niveles y tres patios. En su fachada se observa un relieve en mármol de San Ildefonso recibiendo la casulla sacerdotal de manos de la Virgen María y los escudos reales de Castilla y de León.

Una segunda parte, ubicada al sur, fue edificada entre 1907 y 1931, actualmente son el anfiteatro Simón Bolivar y oficinas. Además, el edificio ha tenido mejoras y adaptaciones al paso de los siglos hasta llegar al siglo XX.

El edificio cuenta, además, con una capilla y sacristía, que datan de 1739. Anteriormente tenía un órgano en el coro, y había algunos retablos barrocos con pinturas y esculturas; además el colegio contaba con una rica biblioteca.

La Colegiata

El salón que en tiempo de los jesuitas se usaba para actos solemnes, ahora recibe el nombre de El Generalito, y a la fecha, contiene gran parte de los sitiales que pertenecieron al coro del templo de San Agustín.

Esta sillería fue realizada en el taller de Salvador de Ocampo (1665-1732), y en sus respaldos muestran algunas escenas bíblicas. En el centro de ellas se encuentra la imagen de San Agustín. En este salón se encuentra una parte de la exposición permanente de arte sacro.

(Con información del Antiguo Colegio de San Ildefonso y de la Secretaría de Cultura).

¿Quién fue san Ildefonso?

San Ildefonso nació en el año 607 en España. Fue un reconocido monje, un prolífico escritor y destacado Arzobispo de Toledo. Se distinguió por una gran devoción hacia la Virgen María.Su festividad es el 23 de enero.