¿Qué nos deja el Año Jubilar y cómo hacer crecer la semilla de la esperanza?

Leer más

¿Qué son y qué no son las posadas navideñas?

Las posadas navideñas pueden ser una herramienta muy importante para evangelizar a la familia y unir a la comunidad. Te explicamos qué son y que no son

16 diciembre, 2019
¿Qué son y qué no son las posadas navideñas?
La celebración de las posadas.

En los últimos años, el sentido de las posadas se ha desvirtuado y se han convertido en simples celebraciones de fin de año, sin embargo, no debe olvidarse su auténtico sentido de preparación espiritual, aseguró Gustavo Bocanegra, catequista y maestro en Pedagogía Catequética por la Universidad Lumen Gentium.

Una posada es un camino de preparación. No es una borrachera, tampoco es un momento para que la gente hable mal unos de otros, para ver quién tiene más o menos dinero o quién se liga a quién”, aseguró el catequista.

Las posadas inician el 16 de diciembre y terminan el 24 de diciembre. Su origen es mexicano, ya que después de la conquista, los misioneros convocaban al público a las iglesias y ahí rezaban una novena, porque esa celebración era un recordatorio de la espera del Niño Dios. Se hacía los nueve días previos a Navidad como un símbolo de los nueve meses de embarazo de María. Luego comenzaron a hacerse en casas y barrios.

“La riqueza de las posadas y la posibilidad que nos brinda cada uno de esos nueve días para acercarnos a la gente es muy grande. Se puede aprovechar como convivencia, pero también para Evangelizar y para atraer a las personas. No estamos en contra de que se baile y de que se celebre”, explicó Gustavo Bocanegra.

Las posadas son una novena que nos prepara para la Navidad.
Las posadas son una novena que nos prepara para la Navidad y celebrar el nacimiento del Niño Dios. Diseño Gráfico Desde la fe.

¿Qué no debe faltar en las posadas?

Al preguntarle cuáles son los elementos que no pueden faltar en una posada, el especialista aseguró que siempre debe haber un momento para la oración, por lo que se recomienda el rezo de las Letanías, pero sería más importante el que “se pudiera rezar el Santo Rosario. ¡Sería excelente!”.

De la misma manera, detalló Bocanegra, no hay que olvidar el canto para pedir posada, llevar la imagen de los peregrinos, las piñatas y la entrega de ‘aguinaldos’, que pueden incluir frutas o dulces, pero sobre todo se debe recordar que las posadas representan un momento de alegría, fe y esperanza porque estamos preparándonos para la llegada del Niño Jesús.

El especialista destacó que se debe considerar también el significado católico de los elementos que representa la piñata: “Los picos de la piñata, por ejemplo, son los siete pecados capitales; la venda de los ojos es muy importante, porque representa la fe de las personas y el palo, la fuerza para romper el pecado”.

Además, puntualizó, las posadas navideñas son una gran oportunidad para que los grupos parroquiales salgan nuevamente de las iglesias: “Anteriormente las posadas se hacían en la calle, se tocaban puertas y cualquier persona que pasara se podía sumar a esta celebración. Eso lo podemos recuperar”.

**Esta nota se actualizó el 17 de diciembre de 2025.



Autor

La redacción de Desde la fe está compuesta por sacerdotes y periodistas laicos especializados en diferentes materias como Filosofía, Teología, Espiritualidad, Derecho Canónico, Sagradas Escrituras, Historia de la Iglesia, Religiosidad Popular, Eclesiología, Humanidades, Pastoral y muchas otras. Desde hace 25 años, sacerdotes y laicos han trabajado de la mano en esta redacción para ofrecer los mejores contenidos a sus lectores.