El Papa León XIV canonizó a los jóvenes san Carlo Acutis y san Pier Giorgio Frassati
El Papa León XIV canonizó a los jóvenes san Carlo Acutis y san Pier Giorgio Frassati para que sean venerados con devoción por todo el mundo.
En el marco de la Santa Misa de Rito de Canonización que se llevó a cabo en una abarrotada Plaza de San Pedro, el Papa León XIV concretó el proceso para designar como nuevos santos de la Iglesia Católica y elevar a los altares a los jóvenes Carlo Acutis y Pier Giorgio Frassati, para que sean venerados con devoción por el todo el mundo
En su homilía, el Santo Padre hizo un llamado al mundo a contemplar hoy a san Pier Giorgio Frassati y a san Carlo Acutis, un joven de principios del siglo XX y un adolescente de nuestros días, “ambos enamorados de Jesús y dispuestos a dar todo por Él”.
Siguieron el ejemplo de San Francisco de Asís
En su alocución, el Obispo de Roma comparó la decisión de los dos nuevos santos jóvenes, con la que en su momento tomó San Francisco de Asís, de vivir en pobreza y preferir el amor a los hermanos, especialmente a los más débiles y pequeños, “al oro, a la plata y a las telas preciosas”, es decir, que “respondieron ‘sí’ a Dios y se entregaron a Él plenamente, sin guardar nada para sí”
“Los santos Pier Giorgio Frassati y Carlo Acutis son una invitación para todos nosotros, sobre todo para los jóvenes, a no malgastar la vida, sino a orientarla hacia lo alto y hacer de ella una obra maestra. Nos animan con sus palabras: “No yo, sino Dios”, decía Carlo. Y Pier Giorgio: “Si tienes a Dios como centro de todas tus acciones, entonces llegarás hasta el final”.
“Esta es la fórmula, sencilla pero segura, de su santidad. Y es también el testimonio que estamos llamados a imitar para disfrutar la vida al máximo e ir al encuentro del Señor en la fiesta del cielo”, aseguró el Papa León XIV.
Acutis y Frassati cultivaron el amor a Dios y a los hermanos
El Papa León XIV destacó el hecho de que ambos, Pier Giorgio y Carlo, durante su vida “cultivaron el amor a Dios y a los hermanos a través de medios sencillos, al alcance de todos: la Santa Misa diaria, la oración, y especialmente la adoración eucarística”.
Otra cosa esencial para ellos, continuó, era la confesión frecuente, además de que tenían una gran devoción por los santos y por la Virgen María, y practicaban generosamente la caridad en todo momento, la cual ejercitaban “sobre todo por medio de pequeños gestos concretos, a menudo escondidos, viviendo lo que el Papa Francisco ha llamado la santidad de la puerta de al lado”.
En este tenor destacó el hecho de que incluso en la enfermedad mortal que los aquejó, ni san Carlo Acutis ni San Pier Giorgio Frassati, dejaron de amar y ofrecerse a Dios y pedirle por ellos y, en especial, por todos.
“Cuando los aquejó la enfermedad y esta fue deteriorando sus jóvenes vidas, ni siquiera eso los detuvo ni les impidió amar, ofrecerse a Dios, bendecirlo y pedirle por ellos y por todos. Un día Pier Giorgio dijo: ‘El día de mi muerte será el día más bello de mi vida’… Por otra parte, a Carlo, siendo aún más joven, le gustaba decir que el cielo nos espera desde siempre, y que amar el mañana es dar hoy nuestro mejor fruto”, recordó el Santo Padre.
Así fue el rito de canonización de san Carlo Acutis y san Pier Giorgio Frassati
Durante el Rito de Canonización, el Cardenal Marcello Semeraro, Prefecto del Dicasterio para las Causas de los Santos, acompañado de los Postuladores, se dirigió al Papa León XIV y le pidió que se realizara la canonización de los beatos Pier Giorgio Frassati y Carlo Acutis.
“Santísimo Padre, la Santa Madre Iglesia pide que Vuestra Santidad inscriba en el Libro de los Santos a los Beatos Pier Giorgio Frassati y Carlo Acutis y que sean invocados como Santos por todos los fieles cristianos”, solicitó el Cardenal, quien procedió a leer la biografía de ambos beatos.
Al concluir la lectura de la vida de los dos nuevos santos y de que se interpretara la Letanía de los Santos, el Obispo de Roma celebró la fórmula de canonización de ambos jóvenes para elevarlos a los altares de la Iglesia Católica.
“En honor de la Santísima Trinidad, para exaltación de la fe católica y aumento de la vida cristiana, por la autoridad de nuestro Señor Jesucristo, de los Santos Apóstoles Pedro y Pablo y la nuestra, después de larga reflexión, habiendo invocado muchas veces el auxilio divino y escuchado el parecer de muchos de nuestros hermanos en el episcopado, declaramos y definimos Santos a los beatos Carlo Acutis y Pier Giorgio Frassati y los inscribimos en el Registro de los Santos, estableciendo que en toda la Iglesia serán venerados con devoción entre los santos. En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo”, determinó León XIV.
El Papa León XIV ordena se redacten las cartas apostólicas
Luego de que el Santo Padre celebrara la fórmula de canonización, el Cardenal Semeraro agradeció el acto y le solicitó al Papa León XIV que solicitara que se redactarán las cartas apostícas de ambas canonizaciones.
“Santísimo Padre, en nombre de la Santa Iglesia doy fervientemente gracias por la declaración hecha por Vuestra Santidad y humildemente le pido que disponga que se redaten las Cartas Apostólicas relativas a la Canonización que tuvo lugar”, pidió el Prefecto del Dicasterio para las Causas de los Santos”, planteó. Ante esta petición, el Papa León XIV respondió de manera puntual y concreta: “Nosotros lo ordenamos”.