“¡Aún necesitamos ayuda!”. El grito desesperado de la Iglesia en Acapulco
Los damnificados de Acapulco por el huracán aún enfrentan dificultades serias, por lo que la Iglesia pide que no se detenga el envío de ayuda
Los damnificados por el huracán de Acapulco aún necesitan de toda la ayuda posible que se les pueda enviar, pues aún carecen de diversos productos que les permita atender sus necesidades básicas, aseguró el padre Filiberto Vázquez Florencio, encargado de coordinar por parte de la Iglesia católica, junto con Cáritas Mexicana, el envío y recepción de la ayuda humanitaria al puerto.
Luego de que el Gobierno federal decretara el pasado 9 de noviembre el fin de la emergencia en los municipios de Acapulco y Coyuca de Benítez, afectados por el paso del huracán Otis de categoría 5, el sacerdote precisó que las familias damnificadas aún enfrentan dificultades muy serias pues aún tiene graves carencias que les dificultan su subsistencia.
“Actualmente estamos en la etapa de respuesta rápida, es decir, que contamos con un plan de acción dónde estamos buscando atender las necesidades básicas de las familias afectadas por el huracán Otis”, indicó el padre Vázquez Florencio, director de la Pastoral Social de la Diócesis de Chilpancingo-Chilapa.
“En esta etapa de respuesta rápida que durará como un mes aproximadamente”, continuó el sacerdote, “se sigue pidiendo el apoyo de donaciones a toda la población para poder atender principalmente las necesidades de alimentos, agua, medicinas y productos de higiene personal para las familias damnificadas”.
Sigan donando, los hermanos de Acapulco necesitan su ayuda
Una vez que pasó la etapa de emergencia, que se da en los primeros día, en la de respuesta rápida todo el trabajo se enfoca en la ayuda humanitaria a la población afectada con el objetivo prioritario de que tenga alimentos, agua y medicinas, sobre todo quienes padecen algunas enfermedades ya diagnosticadas.
Por esta razón, reiteró el padre Filiberto Vázquez Florencio, hizo un nuevo llamados a los fieles de todas las diócesis del país, así como al pueblo en general a que sigan apoyando y entregando sus donaciones de productos en las diferentes parroquias o en las instalaciones de las Cáritas diocesanas, quienes se encargarán de entregarlas de manera segura a la Diócesis de Acapulco.
TE RECOMENDAMOS:
“¡Que no pare el envío de víveres!”, pide Cáritas Acapulco
¿Qué otras acciones realizará Cáritas Mexicana para apoyar a los damnificados de Acapulco?
A la par de que se mantiene la etapa de respuesta rápida para apoyar a las miles de familias damnificadas de Acapulco por el huracán Otis, la Iglesia, a través de Cáritas Mexicana, ya inició los primeros trabajos relacionados con la etapa de diagnóstico de la situación en que se encuentran las localidades afectadas por el fenómeno natural para iniciar la ayuda de la población.
“Vinieron voluntarios técnicos de otras Cáritas de Emergencia, en este caso de Tula, Hidalgo, y de Texcoco, Estado de México, quienes comenzaron a hacer unas encuestas que ingresan a una plataforma en donde llenan unos formularios y a partir de los que se generan datos y con ellos un mapa de la situación que hay y de las necesidades, con lo que se proyecta la ayuda que se requiere”, informó el padre Vázquez Florencio.
Estos trabajos de la etapa de diagnóstico, añadió el vicario permanente de la Parroquia la Esperanza de María en la Resurrección del Señor, Dennis Ricardo Herington Sánchez, permiten conocer las zonas en las que se va a intervenir para ayudar en la reconstrucción de las viviendas y a qué población van a atender.
En este sentido, estimó que, en un primer momento, para mediados de diciembre próximo se podrían estar entregando los primeros apoyos de materiales para ayudar en la reconstrucción de algunas casas de las zonas dañadas, “ya nos enfocamos más en materiales como láminas y clavos, por ejemplo, para que puedan empezar a reconstruir en lo básico”.
La reconstrucción, última etapa de apoyo de la Iglesia a los damnificados
Finalmente, el padre Filiberto Vázquez Florencio indicó que la última etapa de la ayuda que brindará la Iglesia Cáritas Mexicana a los damnificados de Acapulco por el huracán se enfoca en el proceso de reconstrucción y en la manera en cómo se distribuirán los recursos económicos donados y la manera en como las empresas participarán.
En este caso, detalló el director de la Pastoral Social de la Diócesis de Chilpancingo-Chilapa, se estima que dicha etapa de reconstrucción se lleve al menos dos años para ver los resultados finales a favor de la población que perdió todo su patrimonio con el paso del huracán Otis.
“Hablamos del destino que tendrá el apoyo económico que ha llegado a través de las donaciones en las cuentas bancarias, así como del apoyo que las grandes empresas puedan donar en especie, esto es con material de construcción y otro tipo de ayudas para la reconstrucción, como lo puede ser con equipos y vehículos”, indicó.
“Se van a buscar también”, concluyó, “recursos específicamente de fondos locales, de fondos nacionales y de fondos internacionales para lograr nuestro objetivo. De esto hablamos ya de un trabajo de un par de años, tal vez, de un trabajo a mediano y largo plazo”.