México despide entre aplausos al Santo Padre: “¡Viva el Papa Francisco!”
Entre aplausos, oraciones y lágrimas, el Papa Francisco fue despedido por miles de feligreses en la Basílica de Guadalupe.
Con aplausos, oraciones y lágrimas, el Papa Francisco fue despedido por miles de feligreses en la Basílica de Guadalupe durante la Misa solemne presidida por el Cardenal Carlos Aguiar Retes, Arzobispo Primado de México. La Basílica vibró junto con con miles de corazones que, unidos en un mismo sentir, aplaudieron a quien enseñó a ser humildes, a ser misericordiosos, a vivir en la fraternidad
En el altar, bajo los pies de la Virgen de Guadalupe, fue colocada la imagen del Santo Padre junto a una veladora y la bandera del Vaticano. Durante su homilía, el Cardenal Aguiar recordó que el ministerio de Pedro fue un ejemplo de liderazgo y compromiso con la verdad, que comenzó en medio de la adversidad.
De manera similar, afirmó el arzobispo, el Papa Francisco vivió su misión como un verdadero sucesor de Pedro, siempre alertando sobre los peligros de la guerra, los enfrentamientos y la división en el mundo.
“Él nos invita a ver la diversidad no como motivo de conflicto, sino como una oportunidad para enriquecernos mutuamente, diciendo: ‘El otro es una riqueza para mí'”.
El Cardenal añadió que el Papa Francisco siempre ha mostrado su interés por extender la presencia de la Iglesia entre los pobres y los más vulnerables, de distintas maneras.
“Hoy estuve frente a nuestra Madre. Carlos, no me di cuenta del tiempo que pasaba, hasta que fueron por mí y me dijeron: ‘Santo Padre, la multitud lo está esperando’. Entonces, tuve que dejar a nuestra Madre”, compartió.
Por ello, recordó el Cardenal, la Basílica de Guadalupe fue el lugar favorito del Papa Francisco, y pidió por su pronta llegada a la Casa del Padre. Al finalizar la Misa, solicitó unos momentos de oración por el Santo Padre y pidió aplausos para “que conste el amor de México al Papa Francisco”.
Mientras tanto, en el atrio de la Basílica, a los pies de la escultura de Juan Pablo II, los fieles instalaron un punto de oración donde rezan y colocan veladoras en honor al primer Papa latinoamericano.