Padre Júlio, el ‘ángel’ de los indigentes de Brasil
El padre Júlio Lancellotti es coordinador de la Pastoral de la Calle de la Arquidiócesis de São Paulo y ha dedicado su vida a las personas sin hogar.
Cada mañana, el padre Júlio se pone su bata y su delantal amarillo de Santa Julia de los Pobres, toma su carrito de supermercado lleno de comida y mascarillas y camina algunas cuadras hasta el “Centro São Martinho”, donde más de 500 personas sin hogar lo esperan todos los días para recibir el desayuno.
Leer. Con solo 6 palabras, una viejita desconocida lo convenció de ser sacerdote
A su regreso, en el camino, reparte la poca comida que le queda y, junto a un grupo de voluntarios, recibe, selecciona y prepara las donaciones que recibe diariamente para continuar su labor.
“Convivimos con la población que vive en la calle, hoy son más de 30.000 personas: el número de mujeres y niños está aumentando”.
“Es una situación, como la llama el Papa Francisco, de descarte para la población y en particular para los pobres, cuyo último lugar es la calle y acaban sobreviviendo en las calles de la ciudad”.
El padre Júlio Lancellotti es el coordinador de la Pastoral de la Calle de la Arquidiócesis de São Paulo, Brasil. En una bella entrevista con Vatican News, cuenta su historia.
Una vocación temprana
Desde muy pequeño, el padre Julio sabía que dedicaría su vida a los más necesitados. Esto lo aprendió de su padre, quien era voluntario en el servicio social para menores.
“Siempre viví con ellos -dice a Vatican News-, y siempre me llamó la atención la violencia de las autoridades hacia los pobres”, dice el sacerdote.
La llamada de Francisco
En octubre del año pasado, el padre Júlio recibió una llamada muy especial, quien lo animó a continuar su labor.
“Hablar por teléfono con el Papa Francisco -dice- fue un momento muy emocionante, muy hermoso, de gran entusiasmo. Lo que cambia quizás ahora es la visibilidad, porque la gente se entera y sabe que el Papa Francisco llama a quien está enfrentando un desafío, una dificultad o cuando quiere transmitir un mensaje importante”.
“Lo que me transmitió a mí es: ‘cuiden a los pobres, estén junto a ellos’. Y lo que me dijo: ‘convive con los pobres como Jesús’”.