Recomendaciones ecológicas para la Peregrinación a la Basílica de Guadalupe
La Comisión de Ecología considera que este evento puede ser una gran oportunidad para cuidar nuestra Casa Común.
Con la finalidad de aportar en el cuidado de la Casa Común, la Dimensión de Ecología de la Arquidiócesis Primada de México, comparte diez recomendaciones para quienes participarán en la peregrinación que se llevará a cabo el 12 de diciembre de 2025, y también la peregrinación de la Arquidiócesis de México, que se efectuará el 17 de enero de 2026.
A su vez, te compartimos los puntos más importantes de Caminando con Laudato Si, Guía para peregrinar cuidando la creación, de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), la Comisión Episcopal para la Pastoral Social y el Cuidado Integral de la Creación de Cáritas Mexicana, cuya finalidad es que cada peregrinación también sea un camino de conversión ecológica, procurando que cada encuentro con Cristo y María nos conduzca a cuidar la casa común.
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Decálogo Ecológico para peregrinar a la Basílica de Guadalupe
1. Actitud cristiana a favor de la Casa Común
Encomienda tu peregrinación a Dios y a la Virgen; ruega y haz un compromiso de cuidar la Casa Común, y de hacer de estas sugerencias un hábito.
2. Usa termo para agua
No llevar agua embotellada reducirá significativamente la contaminación del entorno de la Basílica de Guadalupe y del propio santuario.
3. Usa mochila
Lleva tus pertenencias en una mochila o lonchera; evita el uso de bolsas de plástico, pues suelen terminar en el piso.
4. Adopta la actitud de las 5R
Durante la peregrinación y en lo cotidiano asume acciones basadas en las cinco R: Reciclaje, Reducción, Reúso, Rediseño y Repensar.
5. Reúsa/ Recicla tus distintivos
Aprovecha los distintivos que utilizaste el año pasado. Si aún no tienes, puedes hacerlos en tu casa con material reciclado.
6. Usa y/o comparte transporte
Debido a la cantidad de fieles que asistirán, te sugerimos utilizar transporte público o bien compartir transporte; evitarás contratiempos y contaminarás menos.
7. Contagiemos nuestra alegría
Portando paliacates, mechudos, pompones y banderines para alegrar el camino hacia la Basílica.
8. Aplica el principio Basura Cero
No tires basura durante tu peregrinaje. Demostremos que sí se puede peregrinar al Tepeyac y dejar a nuestro paso las calles limpias.
9. Recoge basura
Si ves basura relacionada con la peregrinación, recógela y deposítala en los botes que existen en Calzada de Guadalupe. Que esto no distraiga tu oración.
10. Comunica a los demás
Comparte estas acciones en tu comunidad o en casa; hazles saber que cualquier acción ecológica puede ayudar a mejorar nuestro mundo.
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Recomendaciones ecológicas para peregrinos de Caminando con Laudato Si, Guía para peregrinar cuidando la creación
1 Evita el uso de desechables
Estos contribuyen a la generación de residuos altamente contaminantes para la tierra y el ambiente. La recomendación es llevar tu propio plato, vaso y cubiertos reutilizables.
2 Manejo de heces fecales
Cuando necesites evacuar en un lugar con tierra, elige un sitio adecuado, haz un hoyo con una vara resistente y coloca la tierra a un lado. Deposita ahí el excremento y el papel, y luego cúbrelo bien para evitar contaminación y aportar materia orgánica al suelo. Al llegar al Santuario, usa los sanitarios disponibles y evita hacerlo en la vía pública para no ensuciar el entorno del templo.
3 Conservación de caminos y áreas comunes
Es importante no dañar los caminos, lugares comunes o áreas verdes, tanto al paso como para acampar. Esto incluye evitar extraer flora, fauna y rocas del medio.
En caso de existir un animal que pueda ser peligroso, procura capturarlo y liberarlo lejos del grupo.
4 Organización del peregrinaje
El camino hacia la Basílica será largo y se transitará por lugares como carreteras, por lo que es importante mantener un orden para minimizar el congestionamiento de automóviles y disminuir la contaminación. De preferencia, usar solo un carril del camino y también respetar las señales de tránsito.
Es importante que los peregrinos se identifiquen con alguna prenda (playera o gorra) durante toda la peregrinación.
5 Consumo local
Durante la peregrinación, elegir alimentos locales es un acto de cuidado por la creación: fortalece la economía de las comunidades, reduce la contaminación y valora el trabajo de quienes producen los alimentos.
Consumir local expresa la fe desde la ecología integral y nos invita a la gratitud, la sencillez y la solidaridad. Cada compra se convierte así en un gesto de justicia, esperanza y vida compartida en comunidad.
6 Separación y disposición final de los residuos sólidos
Se recomienda llevar tres bolsas para separar residuos: una para basura orgánica, otra para plásticos y otra para desechos generales. Además de clasificar correctamente, se invita a recoger un poco más de basura de la que se generó y motivar a otros peregrinos a hacerlo.
Se sugiere regresar a la comunidad con los residuos para reflexionar sobre la cantidad producida y comprometerse a reducirla en futuras peregrinaciones, especialmente los desechos de productos industrializados. Los residuos orgánicos pueden compostearse en la comunidad.
7 Pirotecnia
El uso de cohetes y pirotecnia genera contaminación auditiva y ambiental. Las explosiones alcanzan hasta 160 decibeles, un sonido que el oído no puede amortiguar a tiempo y que daña las células encargadas de la audición, afectando tanto a personas como a animales.
Además, la pirotecnia contiene químicos como sulfatos, cobre, litio, bario y perclorato de sodio, que al explotar liberan monóxido de carbono y partículas contaminantes que contribuyen al efecto invernadero y a problemas respiratorios. El perclorato también perjudica a microorganismos y fauna acuática.
8 Cuidemos a compañeros perros
Cada año, tras la peregrinación del 11 y 12 de diciembre, la Alcaldía Gustavo A. Madero reporta decenas de perros abandonados alrededor de la Basílica de Guadalupe. Algunos se extravían entre los tumultos mientras acompañan a sus dueños; otros son perros en situación de calle que se acercan por la comida disponible durante el evento y luego permanecen en la zona.
Aunque algunas organizaciones los rescatan para darlos en adopción, es importante prevenir que estos animales queden en el olvido tras la peregrinación.
9 Solidarízate con los peregrinas en la conservación de la casa común
Ofrecer alimento a los peregrinos es un acto de fe y hospitalidad que refleja la ternura de Dios y la solidaridad de María. Para vivirlo con responsabilidad, se recomienda dar porciones pequeñas que eviten el desperdicio y reducir el uso de desechables usando recipientes reutilizables o los que el propio peregrino lleve.
Compartir de manera consciente no es dar menos, sino dar mejor: con amor, cuidado del medio ambiente y respeto por la casa común. Así, el alimento se convierte en una verdadera bendición que nutre sin dañar.
10 Da Gracias a Dios
Hacer composta con los residuos orgánicos de la peregrinación es una forma sencilla de cuidar la tierra y devolverle vida. Solo hay que elegir un lugar poco transitado, cavar un hoyo, depositar ahí los restos y cubrirlos con tierra para que nutran y revitalicen el suelo.
Al terminar, realiza esta oración:
OREMOS
Señor, te damos gracias por la experiencia
que nos permitiste tener, por caminar a tu
encuentro y ayudarnos a fortalecer
nuestra fe. María, Madre de Jesús,
acompañante incansable de nuestra
familia y comunidad, a ambos pedimos
ayuda a ser claros en el discernimiento
para entender que debemos sembrar lo
que queremos cosechar, cuidar y proteger
lo que queremos conservar sin excusa,
pereza y orgullo, que con estas acciones
logremos una mejor forma de vida para no
ser destructores y desleales de la casa que
nos has heredado Señor. Amén.

