Iglesia y sociedad: amigos que se unen tras la tragedia
Después la pérdida de sus hijos en el derrumbe del Colegio Rébsamen, un grupo de padres de familia formó una brigada apoyo emocional y médico a otros afectados.Abimael César JuárezHan sido numerosas las muestras de solidaridad con las víctimas del sismo del 19 de septiembre del año pasado, en especial con la comunidad de la […]
- Después la pérdida de sus hijos en el derrumbe del Colegio Rébsamen, un grupo de padres de familia formó una brigada apoyo emocional y médico a otros afectados.
Abimael César Juárez
Han sido numerosas las muestras de solidaridad con las víctimas del sismo del 19 de septiembre del año pasado, en especial con la comunidad de la iglesia de Nuestra Señora del Carmen y San José, ubicada al sur de la Ciudad de México, donde muchas familias no sólo perdieron sus bienes, sino algunas de ellas a sus hijos en el derrumbe del Colegio Rébsamen.
A pesar de la pérdida, algunos de los padres de familia de los niños que fallecieron en esa escuela formaron la asociación Brigada Amigos para superar el dolor propio y también para ayudar a otras familias afectadas.
Este equipo brinda apoyo mediante consultas médicas y psicológicas, reparte ropa, despensas, víveres y juguetes, además organiza funciones de teatro, dinámicas grupales y proyección de películas, no sólo en la Ciudad de México, sino también en Puebla y Morelos.
En entrevista, el padre Genaro Chávez Vázquez, párroco de la comunidad y cercano a las familias del Rébsamen, asegura que el objetivo principal de la brigada es fortalecer la fe y esperanza de quienes sufrieron algún tipo de pérdida.
“A los brigadistas esto les ha traído consuelo, porque tienen la necesidad de participar de estas actividades con todo el amor y el cariño, como si lo hicieran para sus hijos o sus familiares perdidos; es una terapia difícil, pero les ha ayudado a sobreponerse”, detalla.
Aseguró que “solamente ellos saben el dolor de la tragedia que viven; sin embargo, se han abierto a la solidaridad y al acompañamiento. Esta es la única respuesta que hemos podido darles ante su dolor y ante la pregunta de ‘por qué a ellos y por qué a sus hijos’”.