¿Puedo regresar a la Iglesia si vivo con mi pareja sin estar casado?

Leer más
COLUMNA

Ángelus Dominical

¿Es posible aprovechar el presente en medio del caos actual?

Vivimos tiempos especiales, pero el mundo sigue igual: cambian los escenarios, no la naturaleza humana. Lo clave es aprovechar el presente para actuar con apertura y generosidad.

6 octubre, 2025
¿Es posible aprovechar el presente en medio del caos actual?
Estamos viviendo tiempos muy especiales, únicos, extraordinarios. Foto: Especial

Ángelus dominical 2025-10-12

LOS RECIENTES ACONTECIMIENTOS en el ámbito político, cultural, económico, eclesial, científico, y los que se puedan añadir, no dan lugar a que se sostenga duda alguna, más bien podemos afirmar rotunda y categóricamente: estamos viviendo tiempos muy especiales, únicos, extraordinarios…

HOY POR HOY, AFIRMEMOS lo mismo que se pudo afirmar en el “ayer por ayer”: jamás habíamos tenido situaciones de tanta coyuntura, con el alto nivel de riesgo y peligro, en medio de numerosas ideas disparatadas, con la velocidad de las comunicaciones, con el desarrollo tecnológico que hemos alcanzado; una vez más: vivimos tiempos especiales…

EN EFECTO, SI ACASO FUERA posible viajar al tiempo de mayor esplendor del imperio romano, estaríamos sorprendidos por los niveles de tecnología, de avances en la medicina, en las ciencias, en las expresiones artísticas, y resultarían semejantes a las de hoy…

Y LO QUE SE AFIRMA del imperio romano, también lo puedes decir de cualquier otra civilización o estructura política, de esta o aquella cultura, aquí o en el continente de enfrente, de los del norte o los del sur, de los ricos o los pobres; en una palabra y haciendo eco a la afirmación del libro del Eclesiastés (1,9): No hay nada nuevo bajo el sol…

EL HORIZONTE QUE MANEJA cada individuo -cada persona- de plano es muy pequeño y corto, breve y fugaz; así que cuando aparezca alguna noticia o moda, o cuando surja éste o aquél iluminado, o cuando quieran venderte a precio de oro lo que es vil-polvo-vil, vuelve a recordar que el mundo sigue siendo el mismo y los que aquí habitamos luego somos hasta peores…

Te recomendamos: ¿Por qué los católicos nos damos tres golpes en el pecho durante el “Yo Pecador”?

¡QUÉ RAPIDO NOS ESPANTAMOS con la noticia escandalosa que definitivamente no es nueva!, ¡con qué velocidad damos crédito a ocurrencias absurdas y descabelladas!, ¡qué cautivadoras son las promesas facilonas por ser de mera saliva!, ¡de qué modo tan ingenuo volvemos a caer ante palabras que endulzan y soban nuestro ego!; todo se conecta con lo mismo que dijo el astuto tentador en el Paraíso (Gén 3,5): ¡serán como Dios!…

HACE YA 533 AÑOS (hoy es 12 de octubre) que aquel navegante genovés llegó a islas en lo que hoy conocemos como las Bahamas (¿cuál isla exactamente?, nadie lo sabe), y aquellos acontecimientos vinieron a dar un vuelco tremendo a todos los que vivíamos allende o aquende el Atlántico, y –por supuesto- los cambios terminaron por afectar a todos los habitantes del planeta…

PERO ALGO SEMEJANTE sucedió cuando Alejandro Magno llegó a las puertas mismas de lo que hoy es India, y –con las debidas proporciones- sucede algo parecido cuando eres capaz de ir más allá de tus propias y pequeñísimas fronteras para ir al encuentro de “el otro”, para compartir y dialogar, para conocer y colaborar…

LA DIFICULTAD DE CADA ÉPOCA, o de cada encuentro humano, viene cuando nos invade el egoísmo y queremos imponer el propio pensamiento, cuando rechazamos desde nuestra ignorancia, cuando pretendemos que todos se ajusten al propio esquema, cuando desconfiando ponemos al otro como enemigo gratuito, cuando damos más cabida a la sospecha y la duda, que al diálogo y al respeto

VIVIMOS TIEMPOS ESPECIALES y cada hombre y mujer, cada joven o viejo, cada rico y cada pobre, vive lo propio y especial de su única historia, de su irrepetible entorno, de lo que le ha tocado vivir; y si bien el pasado no lo podemos cambiar (¡así sucedió!), y si bien el futuro no lo podemos asegurar (¡será lo que será!), el presente es lo que tienes –breve y fugazmente- en tus manos y es tu tarea hacerlo especial…

ME HAS DE DISCULPAR si hoy me lees medio filosófico y abstracto, medio volando con especulaciones y aterrizando en olas de imprecisión, pero la verdad es que ando muy atareado y sin oportunidad de ser más humano, más cálido y sencillo, más ligero y práctico…

TERMINO PIDIENDO UN FAVOR: mañana lunes completaré un año más de vida y aunque ya no me cuadra el tradicional canto de “Las mañanitas”, acuérdate de mí con una oración, y si es cantada, pues mejor: no la oigo yo, sino Dios que con todos está…