El plato fuerte
Para hablar y comer pescado –dice el refrán popular- ¡hay que tener mucho cuidado!
LA ENSALADA QUE OFRECÍ la semana pasada (¡gracias por comértela leyendo!) fue anticipo de un plato fuerte -¡sabroso!- que hoy te entrego calientito, recién cocinado y que yo mismo disfruté sin haber puesto un solo ingrediente: me lo encontré navegando por internet y te lo remito tal cual… SERÁ NECESARIO ENTRAR en el canal de youtube.com y teclear “René ZZ mi testimonio”; y antes de que lo veas, permite que te advierta algunos puntos con la finalidad quitar falsas expectativas o prejuicios que solemos tener los “bienpensados”, los “bienportados”, los “bienpeinados”… LO PROPIO DE UN PLATO fuerte es la proteína de origen animal, ordinariamente una buena porción de pescado, pollo, res o cerdo; cualquiera de estos animales llegan a ser producidos en granjas (o cazarlos), y aunque sean domésticas todos pasan por cuchillo y hay que prepararlos dejando a un lado piel, vísceras, plumas, ¡hay que limpiarlos, pues!; así que no te espantes de que fulano René ZZ venga de una granja urbana y haya que quitarle escamas o plumas, o lo que te estorbe… NO, NO QUIERO NI OFENDER ni denigrar por el pasado de quien ha sido “youtuber” dedicado a tatuajes y experto en el tema, al punto que él mismo es un extenso abanico o muestrario de lo que ha sido su vida y su afición, así que si te topas con lo que ha publicado hace un año, o dos, o más, ni sudes ni te acongojes, apenas estarás viendo algo de su origen… PREPÁRATE PARA VER el video pues tiene una duración de 45 minutos y conviene verlo completo -¡com-ple-ti-to!- porque aunque no sea un teólogo o catequista cualificado por tal o cual obispo o párroco, te dará una buena lección basado en su propia experiencia, en su personal crecimiento que va más allá de un itinerario académico o filosófico, semejante al que han recorrido hombres y mujeres de la talla de San Agustín, de George Bernanos, de Blas Pascal o de cualquier otro bautizado que toma su condición de hijo de Dios en serio (acaso tú, amable lector)… PARA HABLAR Y COMER PESCADO –dice el refrán popular- ¡hay que tener mucho cuidado!, y el plato fuerte parecería que es como lamprea o lisa (pescados sabrosos pero con mucha espina), y es que el amigo René tiene como eje de su experiencia espiritual un sueño, uno entre otros miles pero singular como el que más; ¡abusado!, no es que los sueños tengan qué peso o valor por sí mismos, jamás dejarán de ser experiencias totalmente subjetivas, sin embargo, si actúas con madurez y equilibrio, en los mismos sueños podrás tener una experiencia de crecimiento… TE ACLARO QUE YO MISMO he tenido que repasar el video una y otra vez no porque sea confuso o trate temas complejos, sino porque en su experiencia –que me parece sincera y profunda- podemos descubrir un espejo para reflejarnos en este o aquel aspecto; por favor no lo vayas a ver por mera curiosidad o recomendación mía, mira el tal video y sácale raíz cuadrada en la conciencia de que no es Palabra de Dios, sino una palabra humana que nos puede llevar a Dios… UN PLATO FUERTE no se realiza en 30 segundos y en horno de micro-ondas: algo de esto es lo que dice el señor René, pues su proceso de conversión no empezó ni ayer ni antier, y su búsqueda –entreverada con gozos y miedos, con luces y riesgos- más que crear facilidades o ventajas, origina compromisos y retos, tanto que en algún momento llega a decir “amargamente me alegré” -¡já!-; tal expresión me recuerda a lo ya dicho por cuántos en tono de contraste y hasta de un absurdo, como cuando san Pablo habla de un “cuerpo espiritual”… QUIENES LEEN ESTA COLUMNA de hace tiempo, saben que muy pocas veces recomiendo algún video o personaje como lo estoy haciendo ahora, y menos en el escaso tiempo de haberlo conocido (¡tiene dos días que me lo topé!), pero lo hago con la confianza y el riesgo de quienes avanzamos por la vida sabiendo que no todo está dicho, que no todo está concluido, que hemos de seguir en búsqueda honesta y sincera… Y YA TERMINO ESTAS recomendaciones para que te des tiempo a ver en paz los 45 minutos del video, que te sabrán sabroso y te nutrirán si estás hambriento, que si ya estás satisfecho y contento, que si ya tus seguridades humanas son mayores que los desafíos divinos, pues te hartará al primer minuto que lo veas y acabarás como la Virgen María dijo en el Magnificat: a hambrientos los llenó de bienes y a los ricos los despidió sin nada (Lc 1,53)…