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COLUMNA

Ángelus Dominical

Angelus dominical: Volver la mirada a la naturaleza

Quienes tenemos la luz de la inteligencia, también tenemos la responsabilidad de cuidar los procesos y ritmos del planeta.

22 septiembre, 2019
Angelus dominical: Volver la mirada a la naturaleza
Angelus Dominical.

DE PLANO ES INAUDITO lo que uno llega a encontrar en internet, y aunque ciertos asuntos estén abordados por especialistas, parecería que el sentido común anda de vacaciones; sin más preludio les diré que en una página que aborda temas científicos se abordó el tema de los reptiles voladores -¡ajá!- y eso quiere decir que hay animales que arrastrándose vuelan, o que al volar se arrastran -¡ajá!-…

EN LA POESÍA BIEN valen modos de hablar y escribir que van colocando juntos a los contrarios (¡qué paradoja!) y entonces se dice de un frío que quema hasta los huesos, o una sabia locura, o de un amor que lastima, o hasta de muertos que están vivos; pero de ahí a que en ciencia se diga que al volar se arrastra, pues no, no y no…

LO QUE TAMBIÉN parece una paradoja histórica es la preocupación sobre la Amazonia que se abordará en octubre próximo en el Sínodo de los Obispos: cuando el avance tecnológico y científico, cuando las máquinas y computadoras se han adueñado de la vida humana, cuando somos capaces de buscar ambientes habitables en la vasta inmensidad del universo, es cuando más urgidos estamos de volver la mirada a “la naturaleza”, a lo propio de este mundo, a los diversos hábitats que estamos destruyendo…

LA DESCOMUNAL QUEMAZÓN que aún no acaba en zonas de Brasil, Bolivia y Perú, no logra despertar la solidaridad responsable de gobiernos y organizaciones, de empresarios y científicos en orden a poner orden -¡valga la repetición como para no olvidar!-, pues corremos el peligro de ser unos arrastrados de este mundo que ya pretenden volar a otros…

EL TEMA DE AMAZONIA no es meramente ambientalista o ecologista; el tema debe abordarse en tono de humanidad, en clave antropológica, pues aunque este planeta pertenece a todos los que vivimos aquí, quienes tenemos la luz de la inteligencia también tenemos la profunda y grave responsabilidad de cuidar sus procesos y sus ritmos, de proveer y evitar de acuerdo a principios que hagan más noble y digna esta Tierra que es de todos, hasta de las cucarachas…

EN ESTE LUGAR ya había yo presentado a un obispo muy singular: Alejandro Labaka, que junto con una religiosa de nombre Inés Arango, se distinguieron por un afán misionero fuera de serie; hay que decir que fueron muertos por tribus amazónicas, pero prácticamente como víctimas de quienes se aferran a intereses económicos e industriales, pues se puede decir que fueron abandonados a su suerte y a su muerte…

POR SUPUESTO que no soy yo quien ha de canonizar a estos hijos de la Iglesia reconociendo oficialmente su testimonio, pero nadie me impide que desde ahora pueda referirme a ellos como mártires de tiempos modernos, en donde la predicación de la fe sigue confrontándose con los poderes mundanos, con intereses rastreros, con trampas mezcladas de cortesía política…

UNA PALABRA DE JESÚS que siempre me ha provocado crisis es la siguiente: “Tengan en cuenta que los envío como ovejas en medio de lobos” (Mt 10,16) -¡¡¡¿qué?!!!- o sea: derechito a ser pasto para las fieras, no hay otro modo de entender; pero no desconectemos la siguiente expresión: “Por tanto sean astutos como serpiente y prudentes como palomas”; misión muy especial que Jesús encomienda a sus discípulos, pero misión que él mismo asumió hasta concluir en la Cruz, con la entrega de su vida que superó cualquier traición, cualquier complot, toda burla y tormento…

VA ADELANTE EN ESTA Arquidiócesis la misión a la que ha convocado el Santo Padre con motivo del centenario de un documento misionero que no he leído (Maximum illud, se llama en latín), pero que ha sido vivido por tantos y tantos bautizados, ya cuando van a evangelizar a otros pueblos, como cuando lo hacen en sus ambientes ordinarios; que no sobre decir que todo el mundo, que cualquier ambiente es tierra de misión…

TE RECOMIENDO QUE durante todo -¡TODO!- el mes de octubre tengas un pensamiento y una acción específica por el tema que nos compete a todos los discípulos de Jesús, el Hijo de Dios, y aunque pueda parecer soso o inútil, basta con que limpies tu casa y tu corazón, con que compartas un encuentro especialmente constructivo  con alguien, para que te unas a la misión de toda la Iglesia…

EN LA SIGUIENTE Noche Santa, a realizarse del 5 al 6 de octubre (pide más informes al 55 5702 2402); abordaremos estos temas y ahí mismo veremos un documental sobre Alejandro Labaka, para conocer su testimonio de entrega y encarnación llevado al extremo, y valga decir que siendo él muy de este mundo jamás anduvo reptando, y sin jamás tener alas voló al cielo como consecuencia de su fe…

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