Desde que comenzó la emergencia sanitaria, las iglesias de la Arquidiócesis de México han buscado estar cerca de sus fieles. La Parroquia de san Judas Tadeo en Cuemanco -ubicada en Calzada del Hueso 1071, colonia Coapa- en la Ciudad de México es una de ellas.
“Desde que cerramos la iglesia comenzamos a pensar en formas creativas para acompañar y ayudar. Es tiempo de cambio, Dios quiere que los sacerdotes salgamos de las iglesias y de nuestra zona de confort”, comenta el párroco, Tharcisse Rocundo.
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El padre Tharcisse explica que, desde antes de la pandemia, la comunidad tenía muchas personas en situación de pobreza, pero esta contingencia agravó la situación de muchas familias. “Obviamente nuestros recursos bajaron al cerrar la iglesia, pero se nos ocurrió poner una mesita, fuera del templo, para que quien quisiera, pudiera donar un poco de despensa, o si lo necesita, tomar algo. Se hizo un llamado a la generosidad de las personas, y ellas accedieron”, comenta el párroco.
La mesa de la despensa está de lunes a sábado, de 10:00 a 12:00 horas, y se requieren principalmente artículos de higiene personal, semillas, comida enlatada y aceite. Estos productos se llevan a las personas a las que la parroquia les suele dar despensa, o a quienes los soliciten. De este programa se benefician cerca de 80 personas cada quincena.
“El grupo juvenil de la parroquia son quienes entregan los productos y otros grupos parroquiales son quienes recaudan los víveres. Ellos van a las casas, debidamente protegidos, para evitar contagios; han participado de una forma excepcional y muy comprometida, se han sensibilizado ante la situación”, explica el sacerdote.
A la par de la entrega de despensas, el sacerdote celebra la Misa por internet a su comunidad, se transmite a través de su página de Facebook: Parroquia de San Judas Cuemanco.
Asimismo, el padre Tharcisse ha realizado procesiones con el Santísimo, que la comunidad acompaña desde sus ventanas. “La gente está necesitada de Dios, tiene hambre de Él; de hecho, he percibido que la fe de la gente ha ido en aumento. Es por ello que los sacerdotes debemos buscar estar cercanos a las personas”.
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