Ante la urgencia sanitaria que vive el país y en nombre de las personas que sufren los estragos de la pandemia, la Conferencia del Episcopado Mexicano hizo un llamado al gobierno federal, los gobiernos estatales y municipales, a olvidarse de intereses personales partidistas, ideológicos, políticos y religiosos para enfocarse en salvar vidas.
Lee: De esta pandemia sólo saldremos en unidad y en comunión
En un mensaje al Pueblo de México, la CEM aseguró que la atención sanitaria, la alimentación y el trabajo son exigencias ineludibles en esta emergencia sanitaria de COVID-19.
“Invitamos a quienes tienen el poder de decidir sobre los grandes proyectos y obras nacionales a considerar la oportunidad de destinar esos recursos, durante los meses en que muchos mexicanos no tienen trabajo, para mitigar las carencias de alimentos en muchos hogares de nuestra nación mexicana”.
Asimismo, los obispos señalaron que los gobiernos federal, estatal y municipal, junto con los empresarios, tienen la oportunidad de liderar al país con todos los recursos humanos y materiales, pues ante la situación actual lo que se requiere es unidad.
“También los obispos y católicos mexicanos queremos participar y superar unidos este flagelo. Estamos llamados a una vida plena de realizaciones en el presente y en el futuro. Necesitamos redescubrir la belleza de nuestra humanidad. El hombre está al centro de la creación. Sin embargo, el mundo ya no será el mismo. Dios nos llama a recrear un mundo nuevo en todo sentido”.
El comunicado resalta que “hoy Jesús Resucitado sale a nuestro encuentro para decirnos: “la paz esté con ustedes” (Lc 24,35), devolviendonos la certeza de que, aunque caminemos por cañadas oscuras (Cfr. Sal 23, 49), Él es el Buen Pastor que nos cuida, «su vara y su cayado nos dan seguridad (Sal 23,4). Las palabras: No temas rebañito mío… (Lc 12,32), son palabras de aliento, confianza y seguridad de parte de Jesús”.
Lee: Ante el coronavirus, la CEM propone estas tres acciones
“Dios-añaden los obispos- nos llama a recrear un mundo nuevo en todo sentido. Estamos llamados a edificar nuestras vidas y la sociedad en el amor (1 Pedro 2,5), en la responsabilidad y la solidaridad. El mayor desafío es rehacer el tejido social resaltando los valores humanos dando primacía a la vida. Con esperanza levantamos la voz en favor de la belleza de la vida y la dignidad humana”.
El comunicado también destaca que esta pandemia es una oportunidad para anunciar y vivir el Evangelio de la Vida, cuidando y valorando la propia y la de todos, pues la vida debe ser acogida, tutelada, respetada y servida desde que surge hasta que termina.
“El Señor de la Vida nos pide honrar la dignidad de toda persona, preocuparnos por la suerte de los demás porque la persona humana está más allá de cualquier Institución y sobre cualquier cosa. En nuestro corazón están especialmente los ancianos, los enfermos, los niños, los indígenas, los migrantes, los que no tienen hogar, los encarcelados, los abandonados, los desempleados y los privados de nacer”.
Asimismo, el comunicado destaca que la sociedad tendría que ofrecer a todos los ciudadanos las condiciones necesarias para vivir con dignidad; sin embargo, está dañada y es necesario que todos perciban la realidad por la que atraviesa el país y cada uno se responsabilice para que pueda cumplir con su cometido, “de ser un espacio de vida digna para todos sus miembros” (PGP 57).
El feminismo, una corriente filosófica y social que busca la igualdad de derechos y oportunidades…
“Y recorrió toda la comarca del Jordán, predicando un bautismo de conversión para perdón de…
El 29 de diciembre iniciaremos el Año Jubilar 2025 en las diócesis del mundo, con…
Lo que empezó en los años 20 del siglo pasado como una causa homicida, al…
‘¡Viva Cristo Rey!’ Hagamos nuestra esta frase, no como grito de guerra, sino como expresión…
El Vaticano publicó la segunda edición del libro litúrgico que contiene las instrucciones relacionadas con…
Esta web usa cookies.