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¿Cómo hablar a nuestras hijas de acoso y violencia?

El caso de acoso a Claudia Sheinbaum nos recuerda la importancia de hablar con nuestras hijas sobre límites, prevención y autocuidado frente a la violencia.

12 marzo, 2020
¿Cómo hablar a nuestras hijas de acoso y violencia?
Claudia Sheinbaum es un recordatorio de la importancia de educar sobre prevención y límites frente al acoso. Foto: Especial

Nos da miedo que nuestras hijas atraviesen situaciones de acoso y violencia, pero el reciente caso de acoso a Claudia Sheinbaum presidenta de México, cuando un hombre intentó tocarla sin su consentimiento en pleno centro de la Ciudad de México, evidencia que estos riesgos están presentes incluso en espacios públicos y vigilados. Para muchos padres, las medidas de seguridad en el hogar ya no parecen suficientes.

Pero, ¿qué más se puede hacer desde casa para prevenir el acoso y enseñar a las niñas a protegerse? Hablar con ellas sobre límites, señales de peligro y estrategias de autocuidado es fundamental. Educar desde la infancia no solo fortalece su confianza, sino que también les permite reconocer y reaccionar ante situaciones de riesgo, recordándoles siempre que nadie tiene derecho a violentarlas ni intimidarlas.

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Sandra Delgado, psicoterapeuta de Cenyeliztli, segura que sí, y el primer paso consiste es hablarles abiertamente de que existe el acoso y la violencia, pues eso les puede dar herramientas para detectarlo a tiempo y pedir ayuda.

El tema hay que abordarlo desde que son pequeñas, y explicarlo de forma clara conforme a la edad de cada persona, así es más probable que ellas lo identifiquen. Necesitamos dejar claro que “el acoso incluye conductas verbales: insultos, rumores y chismes, propuestas insistentes para conseguir citas o sugerencias sexuales; también conductas no verbales: miradas insistentes o insultantes, roces, manoseos, e incluso, por mensajes con imágenes o contenido sexual a través de cualquier medio digital”, explica.

Muy importante:
Es necesario promover el respeto desde la familia: no hacer referencias a su cuerpo, o presionarlas por verse de una u otra forma, sino que cuiden su cuerpo y lo valoren.

Deben entender que tienen derecho a decir ‘no’: así contarán con las herramientas necesarias para prevenir acoso y violencia, y reconocer conductas que las hacen sentir incómodas.

También es indispensable promover la confianza en la familia: decirles que, en caso de vivir una situación de acoso, pueden contar con su familia.

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Frente a una situación de acoso y violencia

Si una joven nos revela que es víctima, es muy importante escucharla y no responsabilizarla ni minimizar el caso. Afrontarlo puede ser doloroso, pero no hacerlo puede acarrear consecuencias graves. De ser necesario, acude a las autoridades escolares o civiles para pedir ayuda.

Si una joven sufrió acoso no le digas: ‘¿Qué hiciste tú?’ o ‘¿Dónde estabas?’. Mejor pregunta: ¿Qué fue lo que pasó?

Testimonio: ‘Nadie puede tocarte sin tu permiso’. Bianca, 24 años.

Tenía 16 años la primera vez que un hombre adulto, escudado tras su figura de autoridad, se me insinuó: yo iba en la prepa y él era mi profesor. Tenía 18 años la primera vez que alguien tocó mi cuerpo sin mi permiso: era el segundo día de clases de mi primer semestre en la universidad y el hombre que iba tras de mí en el transporte público se frotó contra mí mientras manoseaba mi pierna.

Tenía 21 años la primera vez que me ofrecieron un puesto a cambio de sexo, y 22 años la primera vez que tuve miedo de rechazar a alguien porque temía de lo que era capaz de hacerme. Y así como esas situaciones dolorosas, he sido violentada en fiestas, en el gimnasio, en la universidad y hasta en mi propia casa, cuando me percaté de que un hombre me espiaba desde afuera de la ventana mientras me cambiaba.

La violencia y el acoso sexual parece venir desde cualquier lugar, pues todas las mujeres tenemos historias en las que un hombre (familiar, amigo, vecino, compañero, desconocido) pensó que podía insinuársenos, tocarnos o agredirnos sexualmente. Enseñar a nuestras hijas a reconocer estas conductas y prevenir acoso y violencia es fundamental para protegerlas y fortalecer su confianza.

Esta nota se actualizó el 5 de noviembre de 2025

 



Autor

Periodista con más de 20 años de trayectoria, titulada de la Escuela de Periodismo Carlos Septién García. A lo largo de su carrera ha colaborado en reconocidos medios nacionales como Milenio, El Gráfico de El Universal, Revista Alto Nivel y Desde la fe, entre otros. Su trabajo se ha enfocado en temas sociales, culturales y de interés humano, con un compromiso constante por informar con profundidad y sensibilidad.