Medelka Fiesco Trejo, autor en Desde la Fe

Vivimos en un mundo dinámico que se transforma a pasos acelerados. En el mundo del mañana, las niñas y los niños de hoy, se enfrentarán continuamente a retos enormes, tanto individuales como sociales. Por esta razón, quienes estamos a su cuidado debemos promover el impulso y la motivación de los pequeños para aprender, conectar con los demás, generar nuevas ideas e imaginar nuevas realidades. La creatividad juega un papel fundamental en el desarrollo de habilidades para ayudar a niñas y niños a adquirir confianza en ellos mismos, afrontar situaciones negativas en sus vidas y crear oportunidades que les permitan marcar una diferencia. Estas son algunas ideas para fomentar la creatividad en tus hijos o en tus estudiantes: 1. Designa un espacio especial. Es importante crear un lugar en el que los pequeños puedan ser creativos. Esto no significa tener una sala de juegos elegante. Puede ser una pequeña esquina con plastilina para modelar o una caja de tu ropa vieja para jugar a los disfraces. La clave es que los niños sientan que ese espacio les pertenece. 2. Facilita Juegos y actividades simples. Así como no necesitas crear un área de juego elaborada, tampoco los niños necesitan juguetes de última generación. Busca elementos que les permitan jugar libremente. Por ejemplo, puedes invitar a los niños a armar con bloques, pero en lugar de seguir las instrucciones, deja que las ruedas de su imaginación giren y construyan lo que quieran. 3. Ofrece “tiempo libre”. También es importante que le des posibilidades de tener espacios de tiempo sin actividades programadas, para que puedan jugar a lo que se les ocurra. 4. Ayúdalos a activar sus sentidos. Llévalos al parque, a la biblioteca, a museo como Papalote o cualquier lugar que se ocurra, y ya cuando estén afuera, pídeles que imaginen, por ejemplo, cómo podría ser viajar a lugares lejanos ¿Con qué animales se encontrarían? ¿Cómo sería ese lugar? ¿A qué olería? ¿Qué ruidos escucharían? 5. Motívalos a desarrollar su talento. Pon atención en sus intereses y ofréceles experiencias o materiales relacionados con los mismos. 6. Dedica tiempo a tu propia creatividad. Como los niños aprenden observando a sus mayores, sé creativo también. Únete a tus hijos o alumnos en sus juegos o cuando están dibujando, construyendo o coloreando. Este tipo de actividades favorecen la integración y la convivencia. Museos como Papalote Museo del Niño Cuernavaca brindan espacios amigables, coloridos y ricos en experiencias para atraer y explorar la curiosidad natural de los niños y las niñas. A través de sus diferentes experiencias ofrece herramientas para un juego creativo sin límites. Aquí podrán hacer burbujas gigantes, caminar sobre un piano gigante para crear su propia música, pintar con luz, trepar y deslizarse sobre un capullo gigante o acostarte en una cama con más de 3,000 clavos, ¡entre muchas otras atractivas actividades! Visita: https://cuernavaca.papalote.org.mx y síguenos en redes. * Madelka Fiesco Trejo Directora de Papalote Museo del Niño Cuernavaca.

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