Así quedó la capilla del Seminario del Buen Pastor de la diócesis de Acapulco, tras el Huracán Otis.
El Seminario de Acapulco tuvo importantes daños materiales luego del paso del huracán Otis
El Huracán Otis azotó con fuerza al puerto de Acapulco provocando daños hasta ahora incuantificables en prácticamente toda la ciudad -uno de los destinos turísticos más importantes de México-, con más de un millón de personas afectadas y al menos 27 fallecidos, de acuerdo con cifras oficiales.
La tormenta de categoría 5 golpeó con fuerza a la ciudad, con vientos máximos sostenidos de 260 kilómetros por hora y rachas de hasta 315; lo que lo convierte en uno de los fenómenos meteorológicos más fuertes de su tipo en la historia reciente el Pacífico mexicano.
Como ha sucedido con la mayoría de los hoteles de la zona costera y con innumerables viviendas a lo largo y ancho de la ciudad, el Seminario del Buen Pastor de la Diócesis de Acapulco también sufrió severos destrozos.
En su página de Facebook, el Seminario confirmó que en el caso de su comunidad las únicas pérdidas son materiales y no hay víctimas que lamentar.
En una breve declaración a medios de comunicación, el vocero de la Diócesis, el padre Omar Infante, afirmó que la Capilla del Seminario diocesano está prácticamente destruída, tal como se puede confirmar en una serie de fotografías compartidas por la casa de formación en sus redes sociales.
En las imágenes se muestra el daño causado por ‘Otis’, que incluyó destrozos en los techos, árboles caídos y mobiliario destruido .
El padre Infante explicó también que las habitaciones de los seminaristas también sufrieron daños importantes, al igual que el 80 por ciento de Acapulco.
Este jueves, los seminaristas y sacerdotes formadores celebraron la primera Misa en su Seminario, en oración por todas las víctimas del Huracán ‘Otis’.
De acuerdo con diferentes reportes de prensa, el tamaño de la tragedia aunado al daño que sufrieron las carreteras de acceso ha provocado la falta de agua potable y de alimentos para toda la población afectada.
Este viernes, el Papa Francisco envió sus condolencias por todos los fallecidos e hizo un llamado a ayudar.
En un telegrama dirigido al Arzobispo Metropolitano de Acapulco, monseñor Leopoldo González González, el Papa rogó por que “se incrementen en la comunidad cristiana los sentimientos de ardiente caridad para colaborar en la reconstrucción de las zonas afectadas”.
Si deseas ayudar, puedes hacerlo a través de Cáritas. Pregunta en tu parroquia cómo puedes contactarlos.
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