El himno para la beatificación del P. Moisés Lira. Foto: Jackie Sánchez
Cuando las hermanas Misioneras de la Caridad de María propusieron al padre José Marcos Alba MSpS componer un himno con motivo de la beatificación del sacerdote mexicano Moisés Lira Serafín (1893-1950), él sintió una profunda alegría, pues desde siempre fue un gran admirador de este sacerdote que enfrentó la persecución religiosa emprendida en nuestro país por el gobierno de Plutarco Elías Calles.
El padre José Marcos solía leer todo escrito que llegara a sus manos relacionado con el padre Moisés Lira Serafín, y sentía una gran admiración por su entrega tan alegre y generosa a Dios, por su sencillez y son confianza en el amor del Padre.
“Todas las frases del canto -refiere el padre José Marcos-, cada una de las estrofas, son palabras del padre Moisés Lira. Si acaso acomodé un poquito las medidas, el fraseo. Pero este himno, titulado “Dios es mi Padre”, es en realidad una síntesis de su mensaje de confianza y de abandono en Dios.
Yo confío en Dios, soy su pequeño,
abandonado a su voluntad, a sus brazos buenos.
Dios es mi Padre, Yo soy su Hijo
y por qué me ama con amor inmenso en el confío.
Dichosos son los pequeños y los sencillos,
dichosos los que confían de corazón,
dichosos los que en Dios ponen toda su vida,
con un corazón de niño, con su confianza y todo su amor
Mi vida con sus afanes el Él confío,
en Él descansa tranquilo mi corazón,
en Él que tanto me ama y todo lo puede,
por eso yo nada temo, toda mi fuerza es confiar en Dios.
Yo confío en Dios, soy su pequeño,
abandonado a Su voluntad, a Sus brazos buenos,
Dios es mi Padre, yo soy Su hijo,
Y porque me ama con amor inmenso en Él confío.
El Padre se complace tanto en los pequeños,
todo mi amor y confianza los tengo en Él,
mi vida en su corazón está bien segura,
me arrojo en sus brazos buenos, con gratitud y con sencillez.
El Padre cuida de mí más que una madre,
por eso en Él me abandono sin temor.
Y yo no me desaliento por mis miserias,
corro a sus brazos de Padre y en el encuentro perdón y paz.
Yo confío en Dios, soy Su pequeño,
abandonado a su voluntad, a sus brazos buenos.
Dios es mi Padre, yo soy Su hijo
y porque me ama con amor inmenso en Él confío.
Hacer lo que a Él le agrada es mi delicia
y transformarme en Jesús es mi ideal,
mi gozo es dejarme amar ser como un niño
y la pasión de mi vida es hacer Su voluntad.
Yo confío en Dios, soy Su pequeño,
abandonado a su voluntad, a sus brazos buenos.
Dios es mi Padre, yo soy su Hijo
y porque me ama con amor inmenso en Él confío
y porque me ama Con amor inmenso En el confío
A través de este himno, “Dios es mi Padre”, el padre José Marcos Alba invita a toda la comunidad a imitar la sencillez del padre Moisés Lira Serafín, y a dejar todos sus temores y afanes en las manos de Dios. “Y es que si Dios nos ama, si es nuestro Padre y todo lo puede, no hay absolutamente nada que temer. Lo único que nos corresponde es ser sencillos ante Él, soltarnos en sus brazos y dejarnos amar.
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