Poco antes de ingresar al hospital el pasado domingo 4 de julio, el Papa Francisco recibió una cruz pectoral hecha con restos de madera de la parroquia de La Asunción, una iglesia que fue destruida en 2020 durante las protestas en Chile.
La imagen del campanario de La Asunción cayendo a causa del fuego dio la vuelta al mundo en ese año y con esta cruz, la Iglesia local busca demostrar que es capaz de levantarse en la fuerza de Cristo, así lo dio a conocer el Arzobispado de Santiago, que publicó la noticia.
En el comunicado de la Iglesia local se puede ver al Papa sosteniendo la cruz y besándola cuando le fue entregada.
“Tiene un significado profundo de una Iglesia que fue quemada en un momento particular, de una herida profunda que vivió la Iglesia frente a estos hechos, pero también del pueblo de Chile, así que eso se lo hice presente al Santo Padre”, dijo monseñor Alberto Lorenzelli, Obispo Auxiliar de Santiago, quien se la entregó.
La cruz fue hecha por docentes y alumnos del Duoc UC, como es conocido el Departamento Universitario Obrero, un Instituto profesional chileno creado por la Pontificia Universidad Católica de Chile, con el objetivo de dar educación gratuita a los estudiantes más pobres.
En la confección de la cruz participaron 60 personas: 12 docentes, 25 alumnos, 15 administrativos y cinco directores, además la comunidad.
La iniciativa surgió cuando los jóvenes comenzaron a limpiar y a recoger los escombros que habían caído de la techumbre y de la cúpula.
“Con una de esas vigas quemadas pudimos confeccionar una cruz pectoral lo que es un signo muy potente, ya que con vigas que estaban -literalmente- en el suelo, pudimos elaborar una cruz. Es un signo de victoria y una respuesta a la violencia por medio de la cruz de Cristo”, dijo el padre Samuel Arancibia, capellán General del Duoc UC.
“Habla de una Iglesia que es capaz de levantarse para mostrar la fuerza de la cruz de Cristo”, agregó.
Chile vivió un estallido social en 2019. El 8 de noviembre de ese año la parroquia de La Asunción, en Santiago, fue saqueada. Bancas, esculturas y cuadros entre otros fueron ocupados para hacer barricadas.
Al año siguiente, el 18 de octubre de 2020, la parroquia volvió a ser atacada, pero esta vez fue incendiada. Aunque llegaron los bomberos, el techo del edificio colapsó. El fuego dejó múltiples daños.
El feminismo, una corriente filosófica y social que busca la igualdad de derechos y oportunidades…
“Y recorrió toda la comarca del Jordán, predicando un bautismo de conversión para perdón de…
El 29 de diciembre iniciaremos el Año Jubilar 2025 en las diócesis del mundo, con…
Lo que empezó en los años 20 del siglo pasado como una causa homicida, al…
‘¡Viva Cristo Rey!’ Hagamos nuestra esta frase, no como grito de guerra, sino como expresión…
El Vaticano publicó la segunda edición del libro litúrgico que contiene las instrucciones relacionadas con…
Esta web usa cookies.