Pregúntale al padre

¿Dios seguirá perdonándome si cometo el mismo pecado una y otra vez?

En el corazón del cristianismo está la certeza de que Dios es misericordioso y que nunca se cansa de perdonar. Sin embargo, esta misericordia no es una excusa para permanecer en el pecado, sino una llamada constante a la conversión.

El Catecismo de la Iglesia Católica (n. 1847) enseña que “Dios creó al hombre por amor y le llama al amor, pero el hombre ha pecado. Sin embargo, Dios no abandona al pecador. Lo llama de nuevo a la conversión para que, confesando su pecado, obtenga el perdón y se reconcilie con Él”. La Iglesia, por tanto, nunca niega el perdón, pero anhela la conversión sincera de cada alma.

El mismo Catecismo, en el n. 1458, nos recuerda que “la confesión regular de nuestros pecados ayuda a formar nuestra conciencia, a luchar contra las malas inclinaciones, a dejarnos curar por Cristo y a progresar en la vida del Espíritu”. Es decir, no se trata simplemente de una mecánica de caer y volver a levantarse, sino de un verdadero proceso de transformación, aunque lento y lleno de fragilidad.

El Papa Francisco aseguraba que Dios no se cansa nunca de perdonar; somos nosotros los que nos cansamos de pedir perdón”; sin embargo, esta afirmación no debe interpretarse como licencia para pecar sin intención de cambiar, sino como un llamado a no rendirse cuando luchamos contra pecados que nos esclavizan. La misericordia de Dios es inagotable, pero no es indiferente al deseo real de conversión.

El Papa Benedicto XVI advirtió sobre el riesgo de trivializar la misericordia. Explicó que la misericordia no elimina la justicia, no transforma el mal en bien. Dios no ignora el pecado, pero lo vence, lo transforma desde dentro. Es decir, el perdón de Dios está disponible, pero implica un camino, una lucha interior, un deseo auténtico de abandonar el pecado.

Por su parte, el Papa León XIV, en una reciente catequesis sobre la misericordia y la ley divina, recordó que la misericordia de Dios está subordinada a Su verdad, por eso Su perdón es siempre un rescate, no una justificación del pecado.

La Iglesia perdona, pero no banaliza el pecado

La Iglesia, en su función materna, perdona los pecados en nombre de Cristo, pero llama a cada fiel a dejarse sanar y transformar. Como enseña el Catecismo en el n. 1431, “la conversión interior es una reorientación de toda la vida, un retorno, una conversión a Dios con todo el corazón, una ruptura con el pecado”. No se trata solo de arrepentirse por miedo, sino de amar más al Dios que nos espera y nos quiere santos.

Entonces, ¿Dios sigue perdonando si caemos en el mismo pecado una y otra vez? Sí, si existe arrepentimiento sincero, dolor por haber ofendido a Dios y un deseo honesto de cambiar. No si el perdón se busca como simple rutina sin intención de conversión.

La misericordia divina no es una negación de la ley moral, sino su manifestación más radical: Dios no nos abandona incluso cuando fallamos, pero su perdón siempre nos impulsa a levantarnos y a caminar hacia una vida nueva.

DLF Redacción

La redacción de Desde la fe está compuesta por sacerdotes y periodistas laicos especializados en diferentes materias como Filosofía, Teología, Espiritualidad, Derecho Canónico, Sagradas Escrituras, Historia de la Iglesia, Religiosidad Popular, Eclesiología, Humanidades, Pastoral y muchas otras. Desde hace 25 años, sacerdotes y laicos han trabajado de la mano en esta redacción para ofrecer los mejores contenidos a sus lectores.

Entradas recientes

Jubileo de los Jóvenes 2025

Es momento de rezar por nuestros jóvenes para que la gracia que Dios tiene preparada…

5 horas hace

Gobernantes malos

El día que los gobernantes entiendan que no deben tratar con la maldad, todo cambiaría.…

6 horas hace

¿Quién inventó el que rezamos en la Iglesia?

El autor indiscutible del Padre Nuestro es Jesucristo, el fenómeno de las distintas versiones se…

6 horas hace

¿Con Clodovis o con Leonardo Boff?

Hay católicos que insisten más en lo social, y otros en lo llamado “espiritual”, como…

6 horas hace

¿Cómo sanar el corazón después de una relación tóxica?

El Psic. Jesús Ramos, terapeuta católico, comparte claves para sanar el corazón tras una relación…

10 horas hace

La contemplación y la prisa

De Pitágoras, el filósofo, se decía que era capaz de escuchar la música de las…

13 horas hace

Esta web usa cookies.