Alberto Quiroga
Dos amigas compartían en un restaurante una taza de café, en una mesa alejada de todos los demás. Aprovechaban para compartirse sus confidencias íntimamente.
Una se quejaba de su mala suerte con los hombres, quienes siempre acababan defraudándola. La otra, que vivía una relación más o menos estable, la escuchaba apenada por su sufrimiento.
-Estoy completamente decepcionada del amor- concluyó su historia.
El amor no decepciona -le aclaró la amiga- por lo menos el verdadero, no. Lo que pasa es que tú confundes lo que es el amor con atracción e incluso con la comodidad. Tus relaciones se han basado en regalos o en el físico. Pides mucho, pero tal vez no pides lo necesario. Te gusta compartir cuando no hay complicaciones, pero si te buscan para un problema, sueles evadirte.
Te quiero, amiga, pero déjame decirte que el verdadero amor es como una carretera de dos sentidos, en donde, así como pides, das, y a veces hay baches, lluvia y deslaves que hacen que disminuyas tu marcha, pero siempre buscas avanzar.
Creo -continuó- que no estás decepcionada del amor, sino de las relaciones e incluso de ti, porque mientras no estés dispuesta a dar, tampoco recibirás. Y tristemente, entras a una relación pensando en cuánto te beneficiaras.
A mí me ha tocado cuidar a mi esposo en la enfermedad y él lo ha hecho conmigo. No somos perfectos, pero tratamos de buscar el bien del otro, eso es lo que nos ha hecho mantenernos. No ha sido sencillo, pero sí satisfactorio.
El verdadero amor no decepciona.
“¿Cómo le hiciste para cuidar tantos hijos?” me dijo mi nieta, de apenas siete años,…
Tras las intensas lluvias en México, la Arquidiócesis Primada de México y organizaciones civiles han…
Cuidar la vida requiere asumir juntos los desafíos de nuestra casa común: proteger el agua,…
La solidaridad no es un concepto abstracto ni un gesto retórico; es una fuerza vital…
San Sebastián, mártir milanés, inspiró a artistas como Tiziano y Debussy. Su fe y martirio…
La serie animada sigue la historia de Abby, una niña de 9 años que vive…