Brillante aproximación sobre las teorías o ideologías de género, desde una visión femenina católica, de la mano de la maestra Martinique Acha Alemán.
La autora, con mucha valentía y claridad, entra en diálogo crítico y constructivo con el pensamiento de quienes encabezan estas diversas teorías, como son: Margaret Mead, Simone de Beauvoir y Judith Butler, al tiempo que vislumbra y plantea nuevas perspectivas antropológicas, como horizontes desde los cuales es también posible abordar los discursos de género que coexisten actualmente.
Varias de estas teorías de género exponen, que el ser humano es intrínsecamente inestable, porque no hay ontología, y que el sexo biológico no aporta datos reales para la conformación de la identidad humana; que en la naturaleza recibida no hay pautas legítimas para conocer lo que soy (hombre o mujer); y que en el fondo, el obrar no sigue al ser. Pero si esto es así, no podríamos entonces justificar el ejercicio físico o una simple dieta alimenticia, aunque aporten grande beneficio a mi cuerpo, pues, en este caso, estaría tomando como verdaderos, datos que mi cuerpo ofrece respecto de la salud. O en todo caso, (siguiendo esta línea de pensamiento) los datos que aporta la biología (órganos sexuales, por ejemplo), no sirven para saber qué soy o quién soy, no dicen nada de mi identidad, pero los mismos datos, paradójicamente, sí sirven para saber que tengo problemas físicos que me hacen ir con el urólogo, o con el ginecólogo, respectivamente.
Las teorías de género predominantes en la actualidad pueden a primera vista, resultar muy atractivas, pero la idea de un sujeto inestable, cuyo único punto de partida es una libertad absoluta, que no tiene sentido ni dirección, es algo muy serio a tomar en cuenta. Una antropología así no permite concebir a la persona como don.
La propuesta de la autora, se desarrolla en torno a la problemática antropológica de la naturaleza y la cultura, afirmando que si queremos desentrañar el misterio de la diferencia sexual, necesitamos tomar en cuenta las nociones de persona, libertad y dignidad, así como desarrollar una ontología peculiar para la antropología. Tarea pendiente y más importante de la filosofía actual. Solo si profundizamos en ello, avanzaremos en nuestra comprensión de la persona y de su intimidad.
Vaya que es importante este tipo de estudios serios y ponderados, para adentrarnos a los difíciles temas de la teorías o ideologías de género.
Cfr. Acha Alemán, Martinique. Género y libertad. Una aproximación a la condición sexuada. Ed. Dignitas humana, CdMx, cfr. PP. 133. 134. 164.
Más artículos del autor: Don Máximo
FB:/MonsAlfonso
TW:@monsalfonso
*Los textos de nuestra sección de opinión son responsabilidad del autor y no necesariamente representan el punto de vista de Desde la Fe.
El padre Robert Mehlhart, presidente del Pontificio Instituto de Música Sacra (PIMS), ha lanzado una…
La Arquidiócesis de México y autoridades penitenciarias de la CDMX construyeron una Capilla en un…
Tener niños pequeños no es pretexto para no ir a Misa, por el contrario que…
El Cristo Negro de Salamanca o el Señor del Hospital, ha sido un símbolo de…
El padre Antúnez, director de Pastoral Infantil de la Arquidiócesis de México, comparte 8 consejos…
En México, la educación católica ha tenido una influencia importante a lo largo de toda…
Esta web usa cookies.