Tras dudar por mucho tiempo y en un momento de crisis, en el que sus pensamientos no lo dejaban en paz, Joel decidió mandar un correo para pedir ayuda psicológica. Desde hace meses tiente ansiedad derivada de un consumo de alcohol y drogas frecuente.

No quiso decirle a su familia, para no molestarla. Creía que nadie lo entendía. Se sentía solo, pensaba que debía “cargar su cruz” todo el tiempo, hasta que no pudo más.

Esta frase, que usamos mucho en la cultura popular de manera imprecisa, creemos que significa sufrir, aguantar o recibir distintas violencias sin el derecho a quejarnos o a pedir ayuda para liberar un poco el peso sobre nuestros hombros. No es así.

Cuando Jesús dijo a sus discípulos: “Si alguno quiere seguirme, niéguese a sí mismo, tome su cruz, y sígame” (Mateo 16:24-RVC), no se refería a abandonarse mental y espiritualmente. Se refería a la necesidad de unirse para llevar un mensaje de esperanza para todas las personas.

Se acerca Semana Santa y las distintas representaciones de Via Crucis de Jesús. En distintas partes del país, las y los Nazarenos “hacen sus mandas”, es decir, se ofrecen caminar una larga distancia cargando una estructura de madera, para agradecer un milagro o para pedir perdón por sus pecados. Eso es un reflejo de la necesidad de las personas de redimirse y transformarse. Sin embargo, no es la única manera de hacerlo.

Orar, cumplir ayunos o hacer sacrificios pueden ayudarnos a estar tranquilos en nuestro interior. Si hay algo que perturba nuestra mente o corazón, es posible que no sea suficiente para sanar.

Podemos acompañar nuestra fe con el cuidado de nuestras emociones, por medio de la atención psicológica. Debemos también fortalecer nuestras redes de apoyo para saber que no estamos solas ni solos, ni si quiera en los momentos más hostiles de nuestra vida.

En el Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la Ciudad de México te ayudamos a “cargar tu cruz”. Es decir, estamos contigo incluso en los momentos de mayor angustia. No sólo te escuchamos, te damos un acompañamiento empático, y ayudamos a encontrar alternativas.

Te damos atención psicológica sin ningún costo, sin juzgar, en la Línea de Seguridad y en el Chat de Confianza 55 5533-5533. Incluso en la madrugada, donde nuestra cruz suele ser más pesada.

Asumir responsabilidades y querer resolver nuestras dificultades por propia cuenta, no tiene por qué ser sinónimo de sufrimiento. La comunidad está ahí para nosotras y nosotros, para contribuir a que sintamos una especie de levedad, de calma y de bienestar en nuestra mente y espíritu.

Salvador Guerrero Chiprés

Coordinador del Centro de Comando, Control, Cómputo, Comunicaciones y Contacto Ciudadano de la Ciudad de México (C5 CDMX).

Entradas recientes

Canta con el Papa! La iniciativa del Vaticano para aprender los cantos litúrgicos en línea

El padre Robert Mehlhart, presidente del Pontificio Instituto de Música Sacra (PIMS), ha lanzado una…

3 horas hace

Construyen capilla en un centro de detención para que las jóvenes presas oren y reflexionen

La Arquidiócesis de México y autoridades penitenciarias de la CDMX construyeron una Capilla en un…

3 horas hace

Tener hijos pequeños no es pretexto para dejar de ir a Misa

Tener niños pequeños no es pretexto para no ir a Misa, por el contrario que…

4 horas hace

¿Cuál es la leyenda del Cristo Negro de Salamanca?

El Cristo Negro de Salamanca o el Señor del Hospital, ha sido un símbolo de…

5 horas hace

¿Cómo hacer que tus hijos se porten bien en Misa? Los 8 consejos de un sacerdote

El padre Antúnez, director de Pastoral Infantil de la Arquidiócesis de México, comparte 8 consejos…

6 horas hace

Escuelas religiosas: ¿Cuáles son las congregaciones dedicadas a la educación?

En México, la educación católica ha tenido una influencia importante a lo largo de toda…

6 horas hace

Esta web usa cookies.