Ganadora del gran premio del Jurado y el Premio del Jurado Ecuménico del Festival de Cannes de 2010, esta película nos introduce en la vida de unos monjes cistercienses en Argelia durante la guerra civil que azotó el país entre 1991 y 2002.

Con un guión basado en hechos reales, con buenas interpretaciones y una fabulosa fotografía, Beauvois nos lleva al corazón de ocho monjes que, después de muchos años de rezar, sembrar la tierra y apoyar al pueblo con algunos proyectos para hacerle frente a la enfermedad y la pobreza, tienen que decidir si abandonan el monasterio ante la crecida violencia, o se quedan ahí dando su vida hasta las últimas consecuencias.

Por supuesto aquí resuenan las palabras del Evangelio: “No hay amor más grande que dar la vida por los amigos” (Jn 15, 13). Una buena película para ver y comentar en esta Cuaresma.

Más artículos del autor: Amigos

P. Sergio Guzmán, S.J.

Entradas recientes

El Papa León XIV hace un llamado para romper el muro de la soledad que viven los pobres

En la Jornada Mundial de los Pobres, el Papa León XIV llamó a romper la…

16 horas hace

Acompañar, escuchar, orar: un camino de esperanza frente al suicidio

Aunque hablar del suicidio es difícil, la oración y el acompañamiento comunitario revelan una verdad…

2 días hace

Extorsión en la Ciudad de México

Los datos muestran que en la Ciudad de México el aumento de las extorsiones superan…

2 días hace

Dios escucha al hombre

La marcha de ayer no es voz de uno o de dos, es voz quienes…

2 días hace

El Papa León XIV se reúne con actores y define al cine como “laboratorio de esperanza”

El Vaticano abrió sus puertas a actores y directores en un encuentro único con el…

2 días hace

“Mi madre y yo”, la película de prime que celebra la maternidad, el perdón y el “sí” por la vida

La película Mi madre y yo presenta historias de mujeres que eligen la vida y…

3 días hace