Conocí a una niña a la que en su Primera Comunión, su hermano mayor le regaló un libro sobre santa Teresita del Niño Jesús. A la niña le gustó que la portada la mostraba sonriente y con un ramo de rosas, sus flores favoritas, y lo leyó. Le sorprendió que a diferencia de las historias que acostumbraba leer, en las que al final los personajes eran ‘felices para siempre’, ésta terminaba en que Teresita ¡moría! Se lo comentó a su mamá, quien le explicó que en realidad la historia acababa bien, pues Teresita se había ido con Dios a ser feliz para siempre. Le alegró mucho saberlo y desde entonces guardó un lugar especial en su corazón para esta santita, de la que años más tarde leyó su autobiografía y pudo venerar sus reliquias. Ya de grande se atrevió a pedirle un favor especial: interceder por la conversión de su mejor amigo. No la defraudó. Antes de fallecer, de avanzada edad, él recibió auxilio espiritual y murió un 1° de octubre, ¡día de la fiesta de santa Teresita!
¡Qué importante fomentar en los niños conocer a los santos y entablar con ellos una relación personal, de amor y confianza que dure toda la vida!
Reflexionaba en ello esta semana en que celebramos a santos muy populares y queridos (el 29 los Santos Arcángeles; el 30 san Jerónimo; el 1° santa Teresita; el 2 los Ángeles Custodios; el 4 san Francisco de Asís y el 5 santa Faustina).
Ayudemos a nuestros niños a que en lugar de admirar a esos héroes de pantalla, de mallas de lycra y prepotentes actitudes, aprendan a relacionarse con los héroes de verdad, los santos, y a imitarlos en su humildad y en sus virtudes.
Visita: www.ediciones72.com
A unos días de haber hecho su Viaje Apostólico más largo, el Papa Francisco ahora…
Los sacerdotes podemos incomodar sobre todo cuando tocamos temas sensibles en la homilía. ¿Qué pueden…
La ansiedad en los jóvenes es un desafío multifacético que puede abordarse desde varios ángulos…
Se acercan los festejos por las apariciones de la Virgen de Guadalupe y tú puedes…
El Papa Francisco citó una serie de prácticas con las que inconscientemente la persona dialoga…
Por esta relación con hermanos de otras religiones, nunca perdí mi identidad católica, nunca traté…
Esta web usa cookies.