La Iglesia Católica dedica cada mes del año a cierto tema de fe, para invitarnos a la reflexión y oración. Julio está dedicado a la ‘Preciosísima Sangre de nuestro Señor Jesucristo’, derramada para nuestra salvación. ¿Cómo responder a esta invitación? He aquí dos propuestas concretas:
Deja que tu corazón de inunde de gratitud y amor por el Señor que te ama tanto que aceptó derramar hasta la última gota de Su Sangre para librarte del pecado y de la muerte.
Amar a los pobres es confesar la fe en el Dios que se inclinó hasta…
La Morenita del Tepeyac recibió a sus hijos para rezar, ante su presencia, el Rosario…
La exhortación apostólica reciente nos traerá enseñanza milenaria, la voz del Papa en esas páginas…
Mons. Francisco Javier Acero, obispo de la Arquidiócesis de México, llamó a un cambio de…
“Señor de la vida, bendice esta agua: que despierte nuestros corazones, purifique nuestra indiferencia, calme…
Los 3 son documentos emitidos por el Sumo Pontífice, pero tienen fines distintos. Aquí la…