AYER: Mientras el salmista canta que “los cielos proclaman la gloria de Dios”, los pueblos de antaño miraban el cielo queriendo leer el maravilloso designio del autor. Mayas y egipcios, babilonios y chinos, ¡hasta los magos venidos de Oriente y llegados a Belén de Judá descubrieron en la noche estrellada el mensaje de Dios! Acuario, Piscis, Libra y Sagitario son nombres de constelaciones que marcan el curso del año solar, y así como lunes, martes y miércoles hacer referencia a la Luna, a Marte y a Mercurio, unos y otros son evidencia de la lectura de la esfera celeste que hicieron los antiguos y nos heredaron como cultura.
HOY: La incandescencia de focos y la luminosidad de pantallas nos han robado la posibilidad de seguir mirando el cielo con asiduidad. Hemos cerrado el libro siempre abierto que noche a noche acuñó relatos y leyendas, historias fantásticas y deseos sublimes de la humanidad sedienta de trascendencia, hambrienta de Dios. Mencionar el zodiaco nos lleva sólo a pensar en superstición que sigue siendo alentada por charlatanes y merolicos, ¡y nos hemos olvidado de un orden cósmico que sirvió como herramienta durante siglos! Parecería que los hombres actuales ya no queremos encontrarnos con Dios y por eso ya no contemplamos el cielo. Sin embargo, el telescopio espacial James Webb nos sigue regalando sorpresas maravillosas que no dejan de hablar de la grandeza y omnipotencia del Creador.
SIEMPRE: Quien lea con respeto el libro del Apocalipsis verá que el cielo es protagonista de la voluntad salvadora de Dios; pero quien lo lea de modo superficial solo verá cataclismos destructores y hasta entrará en un pánico absurdo por ilógico, tremendista por fantástico. Quien se asome seriamente a los siguientes descubrimientos de astrónomos y científicos terminará por toparse con Dios invisible a telescopios pero esplendente a la inteligencia natural; quien se asome por mera curiosidad y termine por decir “¡qué bonito!”, o “¡ya lo vi!”, hará deshonor al trabajo de hombres y culturas que quisieron -como dijo Jesús- ver lo que vemos y no lo vieron, oír lo que oímos y no lo oyeron.
Borgo Laudato Si’ es un espacio ecológico y espiritual creado por el Papa Francisco para…
El duelo por la pérdida de una mascota ayuda a los niños a entender el…
“In illo uno, unum”, que se puede traducir “siendo el uno, nosotros somos uno”, pero…
Si bien la beatificación y la aprobación de su canonización se hicieron durante el pontificado…
El Concilio de Nicea no es solo una página de la historia: es una brújula…
El Papa Francisco dejó pendientes varias canonizaciones, incluyendo a Carlo Acutis y ocho beatos más.…
Esta web usa cookies.